El mecanismo sucesorio

La monarqu¨ªa belga, fundada por Leopoldo I, es hereditaria y se ha transmitido hasta 1991 por orden de primogenitura, con exclusi¨®n de las mujeres. En dicha fecha el Parlamento estableci¨® la igualdad de sexos ante la sucesi¨®n a la corona. El orden din¨¢stico es el siguiente: en primer lugar, el pr¨ªncipe Alberto de Lieja, hermano del rey, y luego sus hijos Felipe, Astrid y los hijos de ¨¦sta, y Laurent.El pr¨ªncipe Felipe no est¨¢ casado, de forma que la l¨ªnea de sucesi¨®n la forman por el momento los hijos de Astrid, casada con un pr¨ªncipe de la casa de Habsburgo. Esto significa que, si Felipe no tuviera descendencia, la corona dejar¨ªa la actual rama de Sajonia-Coburgo-Ghota y pasar¨ªa a los Habsburgo.

Los poderes del monarca son limitados. Seg¨²n la f¨®rmula consagrada, el rey "reina pero no gobierna". Ejerce, sin embargo, una influencia moderadora durante las crisis gubernamentales, bastante frecuentes en B¨¦lgica.

El rey promulga las leyes. Pero su firma tiene que ir siempre acompa?ada de la de un ministro, que asume de esta manera la responsabilidad por los textos rubricados. Y es que si el rey nombra y revoca a los ministros, ejerce el mando de las Fuerzas Armadas y tiene la prerrogativa de disolver las Cortes, se trata de poderes ficticios, ya que tienen que ser avalados siempre por un miembro del Gobierno.

Una diferencia importante con la monarquia brit¨¢nica, sin embargo, es que el rey de B¨¦lgica juega un papel de conciliaci¨®n en caso de renuncia del primer ministro. Est¨¢ encargado de recibir a todos los l¨ªderes pol¨ªticos para nombrar a un sucesor, lo que le confiere un margen de maniobra importante.