Violentos combates en los territorios de Croacia ocupados por los serbios
ENVIADO ESPECIAL La artiller¨ªa de la autoproclamada Rep¨²blica Serbia de Krajina (Croacia) lanz¨® ayer el m¨¢s violento ataque de los ¨²ltimos meses contra objetivos militares y civiles croatas en la costa y en Dalmacia interior. En la ciudad de Zadar, las granadas de artiller¨ªa causaron varios heridos graves, mientras Otocac y Gospic estuvieron sometidas a un intenso bombardeo que confirma la reactivaci¨®n del frente serbo-croata en esta regi¨®n.
La alarma general continuaba vigente en Zadar y Biograd a ¨²ltima hora de ayer. La artiller¨ªa croata tambi¨¦n estuvo activa. Mientras serbios y croatas combat¨ªan en Dalmacia, en la regi¨®n de Konjic (Bosnia) los serbios apoyaban las acciones de los croatas contra las fuerzas bosnias.Pocos kil¨®metros al sur, en el frente oriental de Mostar, miembros del Ej¨¦rcito serbio y montenegrino suministran desde hace semanas gran cantidad de armas y munici¨®n a los musulmanes a cambio de la ¨²nica moneda realmente v¨¢lida ya en la regi¨®n, el marco alem¨¢n. Operaciones similares han proliferado tambi¨¦n en el frente suroeste. de Sarajevo.
En Mostar oriental, dirigentes leales al Gobierno de Sarajevo hablan de la posibilidad de un pacto entre musulmanes y serbios que garantice a los primeros un amplio corredor al mar por el valle del Neretva, y deje en manos serbias toda la costa croata al sur de la desembocadura de este r¨ªo, incluida la hist¨®rica Dubrovnik.
Esta idea, que puede resultar sorprendente o ilusoria tras cerca de un a?o en el que se perfilaba la repartici¨®n de Bosnia entre serbios y croatas, no lo es tanto a la vista de la r¨¢pida mejor¨ªa de la posici¨®n militar de las fuerzas leales a Sarajevo y la debilidad de las fuerzas croatas. Este plan, explicado en demasiadas ocasiones por l¨ªderes bosnios musulmanes como una pura excentricidad, equivaldr¨ªa a la reanudaci¨®n de la guerra total entre Croacia y Serbia.
La nueva guerra entre Croacia y Serbia ha sido vaticinada por muchos observadores y los servicios de informaci¨®n militares que operan en la regi¨®n cuentan firmemente con ella.
Lejos de esta cada vez m¨¢s compleja y explosiva madeja de conflictos y alianzas locales en el escenario b¨¦lico de los Balcanes, el presidente bosnio Alia Izetbegovic busc¨® apoyo en Washington para una mejora de la oferta territorial para la futura rep¨²blica de mayor¨ªa musulmana tras la divisi¨®n de Bosnia en la mesa de negociaciones. Izetbegovic recibi¨® poco m¨¢s que buenas palabras del presidente Bill Clinton con el que se entrevist¨® durante una hora. Pero la presi¨®n de Washington sirvi¨® para que Izetbegovicmostrar¨¢ su disposici¨®n a volver a la mesa de Ginebra.
Que a estas alturas del conflicto Clinton se limite a pedir una "soluci¨®n justa" en las negociaciones demuestra que tras los cambios de pol¨ªtica, declaraciones y amenazas, la Casa Blanca sigue sin tener una pol¨ªtica definida para la regi¨®n balc¨¢nica.
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