Golpe de Estado de Yeltsin
La C¨¢mara le sustituye por Rutsk¨®i y pide al Ej¨¦rcito que defienda la legalidad constitucionalEl Parlamento destituye a los ministros de Defensa y de Seguridad, fieles a Yeltsin
El presidente de Rusia, Bor¨ªs Yeltsin, dio ayer un golpe de Estado, al disolver por decreto el Parlamento, provocando una situaci¨®n de consecuencias imprevisibles y un conflicto de lealtades que afectaba a todos sus compatriotas. Est¨¢ en juego la suerte de Rusia. 0 Yeltsin, de 62 a?os, consigue imponer su decisi¨®n, la m¨¢s arriesgada que ha tomado desde que fue legido, presidente en 1991, o el pa¨ªs corre riesgo de una guerra civil. En la madrugada de hoy exist¨ªan informaciones contradictorias sobre la posici¨®n del Ej¨¦rcito de los poderes f¨¢cticos, elementos decisivos en la resoluci¨®n del conflicto creado por Yeltsin en su intento de resolver, de una vez, el persistente contencioso que le enfrenta con el Parlamento desde hace un a?o.
El Parlamento pas¨® ayer inmediatamente al contraataque. De acuerdo con las atribuciones previstas en la Constituci¨®n rusa (art¨ªculo 121), el legislativo destituy¨® de forma inmediata al presidente por haber atentado contra otros ¨®rganos de poder del Estado. En una sesi¨®n iniciada a medianoche, 144 diputados votaron. a favor y seis se abstuvieron. No hubo votos en contra.El Parlamento vot¨® tambi¨¦n a favor de la entrega de competencias presidenciales al vicepresidente Alex¨¢ndr Rutsk¨®i, por un total de 137 votos a favor, 5 en contra y 3 abstenciones. Rutsk¨®i jur¨® poco despu¨¦s ante el Parlamento como presidente de la Federaci¨®n Rusa, pidi¨® a la C¨¢mara que tomara la decisi¨®n de realizar elecciones presidenciales y promulg¨® su primer decreto, en el que declaraba inv¨¢lido el decreto de Yeltsin (el n¨²mero 1.400) que lleva el neutral t¨ªtulo de "Sobre la reforma constitucional por etapas". En una sesi¨®n de tres horas, el Tribunal Constitucional, por 10 votos a favor y 4 en contra, declar¨® ilegal el decreto de Yeltsin y consider¨® que exist¨ªa base para destituirle.
Ampar¨¢ndose en el refer¨¦ndum del pasado 25 de abril, que expres¨® un voto de confianza en el presidente, pero no dio base para convocar elecciones anticipadas, Yeltsin disolvi¨® tanto el Congreso de los Diputados Populares (el superparlamento, formado por m¨¢s de 1.000 esca?os) como el S¨®viet Supremo (el Parlamento permanente, que consta de unos 250 esca?os).
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M¨¢s informaci¨®n en las p¨¢ginas 2 y 4
Editorial en la p¨¢gina 10
El Ej¨¦rcito dice que acatar¨¢ la Constituci¨®n y las leyes
Viene de la primera p¨¢ginaEl presidente anunci¨® que, hasta la entrada en vigor de un nuevo Parlamento bicameral m¨¢s reducido, los ¨²nicos m¨¦todos de direcci¨®n del pa¨ªs son los decretos del presidente y las disposiciones del Gobierno. Yeltsin anunci¨® elecciones a la c¨¢mara baja de este nuevo Parlamento para el 11 y el 12 de diciembre, quedando reservada la c¨¢mara alta al Consejo de la Federaci¨®n, el organismo reci¨¦n constituido que est¨¢ formado por los representantes del poder Ejecutivo y el Legislativo de la mayor¨ªa de los territorios integrantes de Rusia, que son un total de 89. Las primeras informaciones que llegaban de las provincias sobre el grado de apoyo a Yeltsin eran contradictorias. Tres distritos de Mosc¨² anunciaron que el decreto de Yeltsin no era v¨¢lido en sus respectivos territorios y el presidium del s¨®viet de la capital hizo p¨²blico un comunicado, seg¨²n el cual el decreto no tiene fuerza jur¨ªdica y no debe cumplirse.
En lo que se refiere a las posiciones de los poderes f¨¢cticos la situaci¨®n no estaba clara; las informaciones diverg¨ªan seg¨²n fueran suministradas por representantes del presidente o del Parlamento. El Colegio del Ministerio de Defensa de Rusia apoy¨® un¨¢nimemente el decreto presidencial, seg¨²n manifest¨® VIad¨ªrn¨ªr Shumeiko, que ayer volvi¨® a ocupar el puesto de primer viceprimer ministro de Rusia, del que hab¨ªa sido cesado por Yeltsin a principios de septiembre, aparentemente para compensar el cese de Rutsk¨®i como vicepregidente de Rusia. En contra de esta informaci¨®n, varios diputados dijeron a esta corresponsal que el Colegio del Ministerio de Defensa no apoyaba el decreto.
Dualidad de poder
El presidente y su equipo parec¨ªan confiar sobre todo en el Ministerio del Interior, cuyo titular Victor Yerin tiene serios conflictos con el Parlamento que lo responsabiliz¨® de los sangrientos enfrentarnientos moscovitas del Primero de Mayo. Yeltsin no consinti¨® en destituir a Yerin, tal como ped¨ªa el Parlamento.El Ministerio de la Seguridad, cuyo titular Nik¨®lai Golushko sustituy¨® recientemente al cesado Victor Bar¨¢nikov, manten¨ªa un total silencio. En una serie de decisiones de madrugada, el Parlamento destituy¨® a Golushko y al ministro de Defensa, P¨¢vel Grashov, y los sustituy¨® respectivamente por V¨ªctor Bar¨¢nikov y el general Vladislav Achalov, ampliando as¨ª la dualidad de poder que afecta a la misma presidencia del Estado.
Un portavoz del Ej¨¦rcito anunci¨® que las Fuerzas Armadas de Rusia, en sus acciones, s¨®lo se regir¨¢n por la Constituci¨®n y las leyes- del pa¨ªs y continuar¨¢n observando una estricta neutralidad. Esta declaraci¨®n, efectuada por la direcci¨®n de Informaci¨®n y Prensa no apoyaba la hip¨®tesis, seg¨²n la que el Ej¨¦rcito estar¨ªa con Yeltsin.
En su decreto, Yeltsin que, seg¨²n la agencia Interfax, se encuentra en una de sus residencias fuera de Mosc¨², intent¨® someter al Gobierno el Banco Central, que hasta ahora estaba sometido al Soviet Supremo, y de esta forma plante¨® tambi¨¦n a Victor Gerashenko el conflicto de lealtades que ayer viv¨ªa toda la sociedad rusa.
El presidente anunci¨® la disoluci¨®n del Parlamento a las ocho de la noche (dos horas antes en Espa?a) en la televisi¨®n. En lugar del telediario nocturno, los pasmados espectadores pudieron contemplar c¨®mo Yeltsin, enfocado sobre el fondo de una bandera tricolor, les anunciaba que hab¨ªa decidido suprimir las actividades del Parlamento desde ayer mismo con un decreto que ya estaba firmado.
Los rusos se han acostumbrado ya a la sarta de ataques que cruzan entre s¨ª con regularidad los miembros del equipo presidencial y los partidarios del vicepresidente y del Parlamento. El de ayer, sin embargo, se sal¨ªa de lo habitual, y superaba incluso al que hiciera el presidente el 20 & marzo pasado. Antes de pronunciar las palabras que le internaban en una v¨ªa sin retorno, Yeltsin tal vez tuvo un momento de duda o fue consciente de la gravedad de lo que iba a decir, porque hizo una pausa y se llev¨® a la boca una taza que estaba situada junto a ¨¦l .
"El Parlamento est¨¢ en manos de un grupo de hombres que lo ha transformado en el estado mayor de una oposici¨®n irreconciliable", dijo Yeltsin, seg¨²n el cual, "escondido detr¨¢s de los diputados, este grupo est¨¢ empujando a Rusia al abismo". "La seguridad de Rusia y sus gentes es m¨¢s preciosa que una obediencia formal a las contradictorias normas creadas por la Legislatura", manifest¨®. La Constituci¨®n rusa, que ha sido parcheada en repetidas ocasiones, contiene numerosas contradicciones y ninguna forma para resolver una crisis de poder mediante elecciones anticipadas, que no est¨¢n previstas.
El refer¨¦ndum del pasado 25 de abril, permit¨ªa tanto a Yeltsin como al Parlamento mantenerse en su puesto hasta el final de sus mandatos, que en el caso de Yeltsin concluir¨ªa en 1996, y en el del Parlamento, en 1995.
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