La clase obrera brit¨¢nica apenas, ve la BBC seg¨²n una encuesta

La clase trabajadora brit¨¢nica ha vuelto la espalda a la BBC. Los dos canales de la British Broadcasting Corporation, la televisi¨®n p¨²blica del Reino Unido, resultan demasiado elitistas para el gusto del 30% de la poblaci¨®n que dispone de menores recursos econ¨®micos, seg¨²n revela una reciente encuesta. El sondeo conf¨ªrma los temores de los directivos de la BBC, que ya en agosto se?alaron su intenci¨®n de hacer "m¨¢s popular" la programaci¨®n para incrementar la audiencia.

La encuesta, efectuada por el Instituto de T¨¦cnicos Publicitarios y difundida esta pasada semana, revela que s¨®lo uno de los 20 programas preferidos por los ciudadanos D y E (trabajadores manuales y obreros sin cualificar) es emitido por la BBC. Y tal programa es el resumen de los partidos de f¨²tbol. Los otros 19 espacios corresponden a ITV, el consorcio de televisiones privadas regionales.La BBC, que pese a sus dificultades sigue ofreciendo una de las mejores programaciones del mundo, se encuentra entre la espada y la pared. La espada son los gustos de la audiencia, que se deslizan de forma imparable hacia los concursos y los culebrones (no s¨®lo entre los ciudadanos D y E, sino tambi¨¦n, aunque con menos intensidad, entre los clasificados como A, B y C). La pared es su condici¨®n de televisi¨®n p¨²blica, sin publicidad, financiada mediante un impuesto general y obligada por estatuto a emitir espacios de producci¨®n propia y alta calidad.

1 ?C¨®mo salir del mal paso? Seg¨²n Nick Phillips, director del instituto que ha efectuado la encuesta, el problema tiene soluci¨®n: "No hay que confundir la calidad con el esnobismo social que practica la BBC. Se puede hacer buena televisi¨®n p¨²blica sin incurrir en el esnobismo".

En la pr¨¢ctica, la cuesti¨®n es m¨¢s dif¨ªcil. La BBC fracas¨® completamente con Eldorado,un fallido culebr¨®n localizado en Espa?a; en cambio, constat¨® una subida de audiencia con El amante de lady Chatterley, una miniserie cuyo mayor m¨¦rito radicaba en la frecuencia con que los protagonistas se desnudaban.

John Birt, director general de la corporaci¨®n, y Alan Yentob, su principal colaborador, afirmaron durante el reciente Festival de Televisi¨®n de Edimburgo que la obligaci¨®n de una televisi¨®n p¨²blica era "dar al p¨²blico lo que el p¨²blico quiere ver". Su prop¨®sito empieza apercibirse en la paulatina reducci¨®n de los informativos, tanto en n¨²mero como en profundidad, y en el incremento de seriales y concursos.

Curiosamente, ITV, el consorcio de televisiones comerciales que se ha hecho con casi todo el p¨²blico C y D, tampoco est¨¢ contento con su suerte. La ITV es l¨ªder en audiencia, pero los ciudadanos A y B, los m¨¢s acomodados econ¨®micamente, prefieren la BBC o Channel 4, la cadena privada de mayor contenido cultural. La ITV, financiada a base de publicidad, quiere elevar su nivel de calidad para captar una audiencia con mayor poder adquisitivo; la BBC, que no admite anuncios, quiere hacer lo contrario: rebajar el list¨®n y hacerse con un p¨²blico m¨¢s abundante y menos selecto.

'EIdorado'

La BBC sufre a¨²n las consecuencias del despilfarro cometido al realizar la serie Eldorado, ambientada en M¨¢laga, que comenz¨® a emitirse en julio de 1992. La cadena p¨²blica brit¨¢nica invirti¨® 1.800 millones de pesetas en la serie, que esperaban que fuera un gran ¨¦xito de audiencia. Tan s¨®lo seis meses despu¨¦s de su estreno, Eldorado fue declarada la peor serie del a?o por los telespectadores brit¨¢nico. La BBC tuvo que dejar de emitirla en julio de este a?o y, desde entonces, las acusaciones de despilfarro no han dejado de llegar a los dirigentes de la cadena p¨²blica.