"Con 'Dispara' he redescubierto los suburbios"
La figura de Goya en su pr¨®ximo empe?o. Despu¨¦s de Lope de Aguirre, san Juan de la Cruz, el baile y las Olimpiadas, el director aragon¨¦s ha vuelto a fijar su mirada en la realidad de las ciudades. Madrid es el escenario. ?Dispara!, su ¨²ltima pel¨ªcula est¨¢ en cartel desde el viernes. Es un drama urbano y rom¨¢ntico, donde Carlos Saura ha metido circo, forzudos, enanos, violadores de barrio y talleres mec¨¢nicos. Antonio Banderas es un periodista enamorado de Francesca Neri, una ¨ªtaloamazona con mucha punter¨ªa, que se convierte en una maquina de matar.Pregunta. ?Contra qu¨¦ o qui¨¦nes dispara su pel¨ªcula?
Respuesta. Son cosas de la protagonista, es una mujer especial que vive una historia de amor truncada por un acontecimiento brutal. No disparo contra nadie ni contra nada, he querido reflejar un estado de ¨¢nimo m¨ªo, una preocupaci¨®n por la violencia en las ciudades.
P. ?Regresa ahora a las ciudades dormitorio y a la periferia madrile?a, como en Los golfos (1959) o Deprisa, deprisa (1980)?
R. No de la forma que me hubiera gustado. Cuando hice Los golfos o Deprisa, deprisa tuve un contacto directo con la realidad de Villaverde, Getaf¨¦, Vallecas... He vuelto a redescubrir la periferia, pero s¨®lo como pretexto, alg¨²n d¨ªa profundizar¨¦, volver¨¦ a retomar estos escenarios.
P. ?Los golfos y delincuentes que usted retrat¨® son casi una pandilla de carmelitas comparados con los actuales?
R. Es natural, todo ha cambiado mucho. Los cinturones urbanos han crecido acogotados por grandes bloques que albergan a poblaciones enteras. La periferia exhibe fealdad, una planificaci¨®n dudosa y una organizaci¨®n catastr¨®fica, s¨®lo la zona Norte, que ha atra¨ªdo a gente con dinero, parece maravillosa.
P. ?Madrid es una ciudad cinematogr¨¢fica?
R. Mis sentimientos son de amor y repulsa. El Madrid que prefiero es el del cielo azul velazque?o de mi infancia. Hoy es una ciudad provisional, cosmopolita, provinciana y desajustada, s¨®lo encuentras armon¨ªa en ciertos lugares del centro. Durante a?os estube viviendo en el barrio de Atocha, ahora vivo aislado a 50 kil¨®metros, en la sierra (no te digo donde).
P. ?C¨®mo reacciona ante un atraco?
R. Jam¨¢s me han atracado, s¨®lo me robaron cinco o seis veces la radio del coche en Andaluc¨ªa. Una vez, a una hora extra?a, vinieron a por m¨ª, era cerca de la plaza de la Paja, uno me reconoci¨® Y le dijo al otro: "A ¨¦ste no, que el director de Deprisa, deprisa!". Me qued¨¦ fascinado.
P. ?Dice muchos tacos en los atascos?
R. Soy paciente como conductor es mi terapia contra la indignaci¨®n ajena. Si me levantan el dedo o me insultan, trato de no irritarme. Hay que tener mucho cuidado con las enajenaciones, estamos expuestos a deseos de vanganza inmediata, es algo que he querido reflejar en mi ¨²ltima pel¨ªcula.
P. ?Cu¨¢ntos errores est¨¢ dispuesto a aceptar p¨²blicamente?
R. No creo en la perfecci¨®n, creo en las obras incompletas. Me apropio de la frase de Cort¨¢zar "Insiste en tus errores porque son tu verdadera personalidad". Menos al principio, he tenido siempre una cr¨ªtica negativa. Me he hecho a la gente que me quiere y a la que no.
P. ?Es usted un conquistador irreprochable e imparable?
R. En absoluto, esa tonter¨ªa ponla en letras de molde.
P. ?Con ?Dispara! cierra su etapa de encargo de cineasta del 92?
R. Siempre he tenido un control de mi obra. Marathon y Sevillanas no fueron pel¨ªculas de encargo, nunca he sentido ese peso. Me responsabilic¨¦ de ellos, me parecieron dos proyectos preciosos.
P. ?Conoce alguna criatura b¨ªpeda de nombre impronunciable y sangre caliente?
R. S¨ª, a los saur¨®matas y algunas de Alejo Carpentier.
R. La dinoman¨ªa ha llegado a Espa?a. ?C¨®mo afronta el fen¨®meno?
R. Estoy encantado de que se hable de esta familia. No s¨¦ por qu¨¦ dicen que se extinguieron hace muchos a?os. Yo y mi hermano Antonio somos de los ¨²ltimos dinosaurios que quedamos vivos.
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