Palestinos e israel¨ªes ponen en marcha el plan de paz

JUAN CARLOS GUMUCIO, ENVIADO ESPECIAL

Apretones de manos, sonrisas y buen humor. Los pol¨ªticos israel¨ªes y palestinos que comenzaron ayer a trazar una avenida hacia la paz parec¨ªan socios de una feliz empresa de ingenier¨ªa. Reunidos en dos lujosos hoteles cairotas, los viejos enemigos de Oriente Pr¨®ximo pusieron puntualmente en marcha los mecanismos para trasladar a la realidad el proyecto de paz firmado hace exactamente un mes en Washington. El Cairo es desde ayer la sede del Comit¨¦ de Enlace, el organismo palestino-israel¨ª que tratar¨¢ de llevar a la pr¨¢ctica las expresiones filos¨®ficas del Gobierno del primer ministro laborista, Isaac Rabin, y de la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina (OLP), que preside Yasir Arafat.

Nabil Shaat, el jovial asesor de Arafat, adapt¨® una definici¨®n de moda en Bagdad en los d¨ªas de la guerra del Golfo. En una frase celebrada por israel¨ªes y palestinos, Shaat describi¨® el grupo nacido en una sala del c¨¦ntrico hotel Sem¨ªramis como "la madre de todos los comit¨¦s".

En el Hilton del balneario de Taba, entretanto, quedaron instaladas otras comisiones que deber¨¢n lidiar con cuestiones m¨¢s pr¨¢cticas. Cerca de las soleadas playas del mar Rojo, no lejos de donde se broncean turistas escandinavas, pol¨ªticos y tecn¨®cratas palestinos e israel¨ªes comenzaron a estudiar los aspectos menos id¨ªlicos del plan que debe culminar con la autonom¨ªa palestina en la franja de Gaza y el pueblo cisjordano de Jeric¨® a partir del pr¨®ximo 13 de diciembre. Ese objetivo es la piedra de toque del proyecto de paz firmado en Washington el pasado 13 de septiembre.

En Taba se comenz¨® ayer a trazar una agenda para discutir la viabilidad de proyectos que van desde la instalaci¨®n de alcantarillado para Gaza hasta la coordinaci¨®n que deber¨¢ existir entre Israel y la OLP para mantener orden en los territorios ocupados. La formaci¨®n de la polic¨ªa palestina de 20.000 miembros ya est¨¢ en marcha en campos de entrenamiento en Egipto y Jordania.

El ministro israel¨ª de Asuntos Exteriores, Sim¨®n Peres, y el representante de la OLP, Mahmud Abas (Abu Mazen), que encabezaron las delegaciones en las conversaciones de El Cairo, no tuvieron reparos en posar d¨¢ndose la mano.

"Estamos aqu¨ª para que el acuerdo entre Israel y la OLP sea un ¨¦xito", dijo Peres, quien a?adi¨® que hab¨ªa comprobado que hab¨ªa un ambiente de seriedad que promet¨ªa ¨¦xito.

Tanto Peres como Abu Mazen, que aparecieron conjuntamente en una breve conferencia de prensa en El Cairo, eludieron preguntas sobre la espinosa cuesti¨®n de los palestinos deportados a L¨ªbano o prisioneros en Israel, el tema central que preocupa no s¨®lo a los familiares de los castigados, sino que se ha convertido en estandarte de las facciones palestinas que califican el proyecto de paz como una farsa que s¨®lo benefecia a Israel. La cuesti¨®n de los millares de prisioneros palestinos en las c¨¢rceles israel¨ªes, dijo escuetamente Abu Mazen, ser¨¢ discutida en la estaci¨®n tur¨ªstica de Taba.

Si bien las negociaciones de cuestiones b¨¢sicas -que se han trasladado a Egipto, sin anular, por supuesto, la importancia de las conversaciones de Washington- abarcan todos los detalles del plan para transferir la autoridad palestina a Gaza y Jeric¨®, ¨¦stas se hallan destinadas a tropezar con interpretaciones contradictorias.

Por ejemplo, una de las tareas que anoche parec¨ªan inconclusas se refer¨ªa nada menos que a los l¨ªmites geogr¨¢ficos que tendr¨¢ la entidad aut¨®noma de Jeric¨®. Nadie sabe exactamente d¨®nde comenzar¨¢ ni d¨®nde acabar¨¢ la competencia de la OLP en el oasis donde Arafat piensa instalarse a comienzos del a?o pr¨®ximo.

"Las dimensiones geogr¨¢ficas de Jeric¨® est¨¢n en alguna parte entre Par¨ªs e Islamabad, pero, a nuestro modo de ver, el acuerdo se refiere exclusivamente a los l¨ªmites del pueblo", declar¨® el parlamentario israel¨ª Efraim Sneh, reflejando la percepci¨®n dominante en Israel.

La cuesti¨®n del retorno de los palestinos de la di¨¢spora es a¨²n mas complicada, y existen poderosos sectores bastante descontentos con la oferta israel¨ª de admitir el regreso de 5.000 refugiados por a?o. El nexo f¨ªsico entre Gaza y Jeric¨® es otro de los temas que busca soluci¨®n. Pero quiz¨¢ lo m¨¢s delicado est¨¢ todav¨ªa por salir a la superficie: la cuesti¨®n de Jerusal¨¦n. Desde ya, existe un comit¨¦ especial para el asunto, pero all¨ª van a aflorar las diferencias m¨¢s resistentes.

Peres, que en tres ocasiones durante la conferencia de prensa respondi¨® a preguntas dirigidas a Abu Mazen, trat¨® de trasladar el enfoque a un plano mayor, al "de la historia", y destac¨® que el principal m¨¦rito de las conversaciones iniciadas ayer fue el de crear una atm¨®sfera de confianza y de buena voluntad mutuas. Cuando se le pidieron m¨¢s detalles, el ministro israel¨ª se disculp¨® con una amplia sonrisa. Dijo que ten¨ªa prisa por asistir a "un almuerzo gratis" con el presidente egipcio, Hosni Mubarak.

Esperanza y escepticismo

La apertura de negociaciones en El Calro y Taba fue recibida entre los dos pueblos con esperanza y escepticismo, asegura V¨ªctor Cygielman desde Tel Aviv. "No pido otra cosa que abandonar Gaza, definitivamente, lo antes posible, pero ?qui¨¦n mantendr¨¢ entonces el orden?", aseguraba un capit¨¢n paracaidista de 26 a?os, Uri, que ha de prestar 40 d¨ªas de servicio en la explosiva franja. "Dos horas despu¨¦s de que nos vayamos, los hombres de Al Fatah [principal grupo de la OLP] y de Ham¨¢s [radicales isl¨¢micos] echar¨¢n las manos al cuello del contrario. La polic¨ªa palestina s¨®lo existe sobre el papel".

Un palestino de 43 a?os, Has¨¢n, era igualmente esc¨¦ptico, tras sumarse ayer a la huelga general convocada ayer por los radicales en los territorios ocupados y cuyo seguimiento fue casi total. "Una tienda puede ser incendiada en un minuto, y no hay nadie que pueda proteger a su due?o", se?alaba.