Champa?a para Dupin

Con la presencia de los Reyes de Espa?a, de la ministra de Cultura y muchos visitantes espa?oles, se abri¨® el mi¨¦rcoles por la noche la Gran Retrospectiva Joan Mir¨®. Como detalles destacables en la organizaci¨®n de la ex posici¨®n, se?alemos que las visitas previas han sido c¨®modas y largamente suficientes (a diferencia de Barcelona, en donde hubo una larga cola el d¨ªa de la inauguraci¨®n). El Spanish Institute ofreci¨® un c¨®ctel -siempre muy formal- a la colonia espa?ola en Nueva York y a las autoridades. All¨ª estaban Jordi Pujol, Marta Ferrusola, el pintor Esteban Vicente y el escultor Xavier Corber¨®. Una aut¨¦ntica invasi¨®n catalana se ha dado estos d¨ªas en Nueva York: la representaci¨®n aut¨®ctona no sal¨ªa de su asombro ante lo multitudinario y a la vez refinado del vernissage (se requer¨ªa, como siempre en el MOMA para estas grandes ocasiones, traje de etiqueta).Y una an¨¦cdota, la vigesimotercera Constelaci¨®n se consigui¨® gracias a la mediaci¨®n de Jacques Dupin, el gran experto en Mir¨®. "?C¨®mo quiere que se lo agradezcamos?", propuso el MOMA. "Oh, brindaremos con champa?a por el ¨¦xito de la exposici¨®n" respondi¨® elegantemente Dupin. El MOMA le envi¨® a la ma?ana siguiente una botella, sin reparar en que para un franc¨¦s el env¨ªo de una sola botella es un fallo imperdonable.