Giulietta en l¨¢grimas
Giulietta Massina, el rostro conmovedor de Las noches de Cabiria o la mirada c¨®mplice de Giulietta de los Esp¨ªritus, esposa y musa de Federico Fellini, fue vista ayer mientras sal¨ªa llorando de su domicilio en v¨ªa Marguta, cerca de la Piazza del Poppolo. Acompa?ada de una hermana y una amiga, sub¨ªa al coche que le trasladar¨ªa al hospital donde se encuentra su marido.
"Federico est¨¢ grav¨ªsimo", dijo la hermana a los periodistas. "Y Giulietta est¨¢ destruida por el dolor. Dejadla tranquila, os lo ruego. Est¨¢ sufriendo mucho. Ayer fuimos a comer a un restaurante del centro con algunos amigos. Federico parec¨ªa tranquilo y bromeaba, estaba contento. Anunci¨® incluso que quer¨ªa dar una gran fiesta la pr¨®xima semana, para festejar junto a los amigos el aniversario de sus 50 a?os de matrimonio. Ninguno de nosotros pensaba que fuera a agravarse de este modo. Roguemos al Se?or para que mejore sus condiciones".
Giulietta hab¨ªa dado ya signos de agotamiento el mes pasado, cuando fue a su vez internada y tratada de un extremo desgaste nervioso provocado por las tensiones vividas durante el ataque cerebral sufrido por su marido.
Unidos en la vida privada y profesional, la c¨¦lebre pareja vivi¨® uno de los mejores momentos de su vida el pasado mes de marzo, cuando se desplazaron a Hollywood para que Federico recibiera una quinta estatuilla de oro, dedicada esta vez al conjunto de su carrera en el cine. "Deja ya de llorar como una tonta", grit¨® aquel d¨ªa, desde el estrado, el director a su mujer, que no hac¨ªa nada por ocultar la emoci¨®n h¨²meda que le inundaba el rostro.
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