Tres pistoleros de ETA matan a un general en Madrid

El comando Madrid de ETA reapareci¨® ayer en la capital de Espa?a con un atentado que cost¨® la vida al general del Aire Dionisio Herrero Albi?ana, de 63 a?os, y dej¨® malherido a su ch¨®fer, el soldado Alberto Pasamontes, de 23 a?os. Los terroristas huyeron en un coche que despu¨¦s hicieron estallar para eliminar huellas e intentar matar a los artificieros. Hubo dos novedades en la acci¨®n de los etarras: actuaron encapuchados y no recurrieron al coche bomba para lograr un golpe espectacular, sino que optaron por la pistola, algo que no ocurr¨ªa desde hace cuatro a?os (el 17 de noviembre de 1989, d¨ªa en que muri¨® ametrallado el teniente coronel Jos¨¦ Mart¨ªnez). Los Reyes enviaron un telegrama a la viuda del general condenando "el cobarde atentado terrorista".

El general Herrero, director de Sanidad del Ej¨¦rcito de Aire, sali¨® sobre las 8.30 de su domicilio, en el n¨²mero 101 de la calle de Hermosilla. Se dirig¨ªa hacia el Volkswagen Santana, un autom¨®vil blindado, de color granate, donde le esperaba su ch¨®fer, el soldado Alberto Pasamontes Navarro.El general hab¨ªa caminado unos 15 metros y, cuando atravesaba la calle de Alc¨¢ntara, fue atacadado por dos individuos armados con pistolas del calibre 9 mil¨ªmetros parabellum. Recibi¨® "m¨²ltiples heridas en t¨®rax, abdomen y miembros inferiores", seg¨²n el parte de defunci¨®n. Uno de los asesinos le remat¨® cuando estaba en el suelo.

"Hab¨ªa salido de mi oficina para tomar un caf¨¦, cuando o¨ª varias detonaciones espaciadas, pero muy seguidas", relata Jos¨¦ Ferro, director de Inform¨¢tica de ELS. "Vi a dos hombres, uno de los cuales llevaba un chubasquero azul y otro, un chubasquero verde fosforescente. Ten¨ªan la cabeza cubierta con las capuchas de los chubasqueros", agrega.

El conductor del general intent¨® acudir en su ayuda, pero fue tiroteado por un tercer terrorista que apoyaba la acci¨®n de los dos pistoleros que atacaron al general. Tras recibir un balazo en el vientre, el soldado se refugi¨® a la desesperada en el autom¨®vil oficial, con matr¨ªcula camuflada M-0621-HP.

El etarra efectu¨® contra ¨¦l cinco disparos, pero los proyectiles no llegaron a atravesar el cristal blindado. Los impactos dejados en ¨¦l muestran a las claras que el terrorista tir¨® a matar, a la cabeza. La polic¨ªa recogi¨® en el lugar de los hechos 10 casquillos SBP.

El soldado Alberto Pasamontes recibi¨® un balazo, con entrada por el flanco izquierdo del abdomen, que le perfor¨® el intestno delgado, el duodeno, el colon y el h¨ªgado. Tras ser operado en el hospital Gregorio Mara?¨®n, su pron¨®stico es "muy grave"."

"?Qu¨¦ pasa, qu¨¦ pasa?"

?Qu¨¦ pasa, qu¨¦ pasa ...?", grit¨® la esposa del general, Isabel Moya L¨®pez, desde la. ventana de su casa al escuchar las sirenas policiales. "Han asesinado a un hombre", le grit¨® un viandante. Isabel Moya se meti¨® al interior de su casa, sollozando, al comprobar que se hab¨ªan cumplido los temores que m¨¢s de una vez hab¨ªa expresado a sus compa?eros de trabajo en la Direcci¨®n Provincial de Educaci¨®n.

Los terroristas se fueron corriendo por la calle de Alc¨¢ntara hasta la de las Naciones, donde ten¨ªan aparcado un Opel Corsa en el que prosiguieron la huida por las calle de Ayala y Pr¨ªncipe de Vergara, hasta llegar a la plaza del Marqu¨¦s de Salamanca, donde lo dejaron abandonado junto a la sede del INI.

A las nueve de la mana?a estallaba el Opel Corsa, gris metalizado, que escond¨ªa en sus bajos unos cuatro kilos de amosal, activado por temporizador. El coche, robado el pasado d¨ªa 6 en la calle del Doctor Garc¨ªa Tapia, en el barrio de Moratalaz, qued¨® destrozado y caus¨® ligeros da?os a otros veh¨ªculos. Con ello, los terroristas borraron las huellas por las que pudieran ser identificados. El coche ten¨ªa una matr¨ªcula falsa, M-5186-JK, correspondiente a un Citroen AX.

"No ha sido muy fuerte porque, si no, no lo contamos. Hab¨ªa mucha gente porque es la hora a la que pasa todo el mundo", dijo una quiosquera de la plaza. Un transe¨²nte, Jos¨¦ Antonio Hidalgo Almagro, sufri¨® un choque emocional.

El delegado del Gobierno en Madrid, Arsenio Lope Huerta, atribuy¨® el atentado a ETA "sin lugar a dudas" y consider¨® "raro" que los terroristas se tapasen con los gorros de sus anoraks. Fuentes policiales sospechan que se trata de activistas legales (no fichados), que intentan no ser reconocidos. Interior ten¨ªa ayer dudas de si este atentado es obra del comando Madrid habitual, integrado por Jos¨¦ Javier Arizpuren, Jes¨²s Garc¨ªa Corporales y Marisol Iparraguirre.

El alcalde de Madrid, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, atribuy¨® el asesinato a "los malditos t¨ªos de ETA", a los que calific¨® de "malnacidos".

Seg¨²n fuentes policiales, el general Herrero no hab¨ªa recibido nunca amenazas ni su nombre figuraba en ninguno de los documentos intervenidos a ETA.

Fuentes oficiosas de Defensa e Interior expresaron su sospecha de que el atentado pudiera ser una represalia por la participaci¨®n de aviones militares en la b¨²squeda del ingeniero Julio Iglesias Zamora, secuestrado por ETA. Pero un alto mando del Aire declar¨®: "Especular con eso es hacerles el juego a los terroristas y atribuirles una capacidad de reacci¨®n que no tienen".

Mandos policiales coinciden en este an¨¢lisis, dado que el coche usado en el atentado fue robado una semana antes de que se conociera la intervenci¨®n militar en esta operaci¨®n. Las mismas fuentes recordaron que ETA ya asesin¨® a siete militares el 21 de junio en Madrid.

El ministro de Defensa, Juli¨¢n Garc¨ªa Vargas, manifest¨®: "A los terroristas, ni agua. Ni agua. Yo no har¨¦ declaraciones, porque en parte viven de lo que decimos todos de ellos. Creo que hablamos demasiado sobre ellos".

La capilla ardiente con los restos del general Herrero qued¨® instalada en el Cuartel General del Aire. A las 20.00 se celebr¨® una misa, y el funeral ser¨¢ hoy a las 9.30. El cad¨¢ver ser¨¢ enterrado en el cementerio de La Almudena.