La controvertida oferta de intercambio de un salteador de trenes por un supuesto estafador

Johann Grzeganek, ciudadano alem¨¢n de 24 a?os, ha pasado diez meses en una c¨¢rcel de Florida por haber tenido una urgencia explosiva de orinar. El pasado 4 de enero, Grzeganek se dirig¨ªa a su pa¨ªs desde Estados Unidos, donde hab¨ªa estado como turista. Como consecuencia del alcohol previamente trasegado, se vio en la necesidad ineludible de efectuar una micci¨®n, mientras, dadas las condiciones de vuelo, deb¨ªa permanecer en su asiento con el cintur¨®n abrochado. Sin embargo, se levant¨® y se dirigi¨® a aliviar sus necesidades. Una de las azafatas le pidi¨® que volviera a su asiento, pero el pasajero respondi¨® en alem¨¢n que la vejiga le iba a explotar mientras gesticulaba con los brazos simulando una explosi¨®n. La azafata, que habla alem¨¢n pero al parecer lo interpreta demasiado literalmente, le insisti¨® en que volviera a su sitio. Grzeganek le replic¨®: "?No, no no, el techo va a volar!". Como consecuencia, fue detenido por falsa amenaza de bomba en un avi¨®n en vuelo. Ahora, el juez Norman Roettger, buen conocedor del alem¨¢n, ha reconocido que algunos alemanes utilizan la met¨¢fora del techo como un coloquialismo para las urgencias mingitorias.-