Barkley demuestra , su poder¨ªo en la final

En su primera aparici¨®n p¨²blica como rey de la NBA, Charles Barkley ha demostrado sobradamente las razones que le han colocado como estandarte de la liga profesional americana, una vez que Jordan decidi¨® hace unas semanas pasar a mejor vida. Barkley cumpli¨® con todo lo que la situaci¨®n exig¨ªa. Lider¨® a su equipo, fue el m¨¢ximo encestador del partido, se encar¨® con los aficionados del Buckler, protagoniz¨® acciones tan espectaculares como su poderoso f¨ªsico y empez¨® a seguir las recomendaciones de sus m¨¦dicos, que le han aconsejado estar tumbado boca abajo cuando permanezca en el banquillo. Algo a lo que se neg¨® hace bien poco.

Barkley es un fil¨®n deportivo y de imagen. De una forma diferente a como lo hac¨ªa Magic Johnson, asume su condici¨®n y explota su particular filosofia. A su vera, un buen n¨²mero de excelentes jugadores no tuvieron especiales problemas en doblegar al campe¨®n italiano y aumentar el tanteo de los partidos NBAFIBA a un incuestionable 12-0. El Buckler hizo lo que pudo, y Casi todo de la mano de Levingston, un veterano ex profesional y, campe¨®n con los Bulls de Jordan. Y es que sin una preparaci¨®n especial, resulta dificil poder presentar una buena oposici¨®n, y si no que se lo pregunten a, Danilovic. Estrella en Europa, el alero serbio desapareci¨® detr¨¢s de la rocosa defensa de un jugador todoterreno, Dan Majerle.

El marcador pas¨® a segundo plano a poco de empezar el encuentro, y el concepto de partido de exhibici¨®n fue m¨¢s que nunca el motivo del encuentro. Se luci¨® A.C. Green, Negele Knight alucin¨® con su diab¨®lica rapidez, y los suplentes volvieron a tener los ¨²ltimos minutos para convencer a su entrenador. Pero por encima de todos y de todo, estuvo una vez mas el nuevo n¨²mero 1 del firmamento baloncestistico. Un gordo bocazas que no conoce a nadie cuando esta en la cancha y que sabe lo que tiene que hace, cuando lo tiene que hacer y para bien de su Liga, c¨®mo lo tiene que hacer.

El Madrid venci¨® al Limoges (123-119) en el partido por el tercer y cuarto puesto. El encuentro necesit¨® de una pr¨®rroga tras el empate en el tiempo reglamentario.