El Senado aprueba su reforma con la oposici¨®n del PNV
El pleno del Senado aceler¨® ayer su conversi¨®n en una C¨¢mara de verdadera representaci¨®n territorial al aprobar por mayor¨ªa absoluta la admisi¨®n a tr¨¢mite de la propuesta de reforma de su reglamento. Esta reforma, que se espera entre en vigor en el pr¨®ximo periodo de sesiones, a partir del 1 de febrero de 1994, crear¨¢ en la C¨¢mara alta una Comisi¨®n General de las Comunidades Aut¨®nomas con amplias competencias y ante la que podr¨¢n intervenir los presidentes y consejeros de ejecutivos regionales. La oposici¨®n del PNV y de EA transform¨® buena parte del debate en una discusi¨®n sobre la autodeterminaci¨®n y la unidad de Espa?a.La propuesta que respaldaban los senadores del PSOE, el PP, CiU, Coalici¨®n Canaria y el Grupo Mixto -salvo EA- obtuvo el apoyo de los 234 senadores presentes de estas formaciones y seis votos en contra: cinco del grupo de senadores nacionalistas vascos y el del representante de Eusko Alkartasuna, Estebe Petriz¨¢n.
Todos los intervinientes coincidieron en que la reforma del reglamento de la C¨¢mara, cuya puesta en marcha ahora se acelera, es s¨®lo un primer paso para la reforma de la Constituci¨®n con el objetivo de convertir al Sena do en una verdadera, C¨¢mara de representaci¨®n territorial. Pero para los nacionalistas vascos esta reforma deber¨ªa ir m¨¢s all¨¢. El portavoz del PNV, Ricardo Sanz, tras indicar que parece existir un "temor irrefrenable" a tocar la Constituci¨®n, afirm¨® que si la potenciaci¨®n de la funci¨®n territorial del Senado se queda en la reforma vista ayer y el cambio de la Constituci¨®n no se replantea de alguna manera el modelo territorial del Estado, va a proporcionar al Senado "cierto desprestigio e, incluso, una merma de su autoridad inmoral- Para Sanz, la propuesta vista ayer "es endeble y se opone a la m¨¢s m¨ªnima l¨®gica", ya que, al no tener car¨¢cter legislativo, la nueva comisi¨®n general de las comunidades en la pr¨¢ctica ser¨¢ "un nuevo Senado dentro del Senado o, si se quiere, la burocratizaci¨®n por la burocratizaci¨®n".
Pero uno de los puntos fundamentales para que los nacionalistas vascos rechacen la propuesta es que cada grupo podr¨¢ nombrar en esa comisi¨®n el doble de los miembros que le correspondan en las dem¨¢s comisiones, con lo que, seg¨²n el PNV, se desperdicia la oportunidad de dar una representaci¨®n diferenciada a las nacionalidades hist¨®ricas, "como naci¨®n", a?adi¨®, "obtener una representaci¨®n, por dem¨¢s exigua, sometida a mayor¨ªas ajenas a los intereses de Euskadi". Sanz apuntaba que en esa comisi¨®n deber¨ªa haber una representaci¨®n m¨ªnima com¨²n y otra variable para las nacionalidades hist¨®ricas.
El senador de EA Estebe Petriz¨¢n fue el ¨²nico que sigui¨® esa argumentaci¨®n y calific¨® la reforma de "corta, superficial y cosm¨¦tica". Petriz¨¢n hizo adem¨¢s una defensa del derecho de autodeterminaci¨®n que la reforma de la Constituci¨®n "podr¨ªa reconocer perfectamente a las llamadas nacionalidades". Estas alusiones fueron replicadas por la mayor¨ªa de los grupos.
Alberto Ruiz-Gallard¨®n, por el PP, record¨® que la Constituci¨®n alude a la indisoluble unidad de la naci¨®n espa?ola y la define "con palabras que tenemos que hacer nuestras, como patria com¨²n e indivisible de todos los espa?oles".
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