Creada en Estrasburgo una asociaci¨®n para defender a los escritores perseguidos
La f¨¦rrea voluntad de m¨¢s de 50 escritores ha logrado lo que el domingo parec¨ªa casi imposible, constituir formalmente el Parlamento Internacional de Escritores. Una asociaci¨®n, ya con m¨¢s de 250 afiliados en todo el mundo, que nace para defender activamente a todos los intelectuales perseguidos, as¨ª como intervenir en casos espec¨ªficos como el ase dio de Sarajevo. Aunque nace en Estrasburgo, ser¨¢ itinerante y funcionar¨¢ de forma permanente. Sus socios actuar¨¢n individual y colectivamente desde las f¨®rmulas m¨¢s creativas de la imaginaci¨®n.Estaban muy cansados y se les notaba, pero no pod¨ªan ocultar su satisfacci¨®n. Reunidos en el mismo hemiciclo del teatro de L'Aubette, donde tan densas reuniones han celebrado durante tres d¨ªas, mostraban todos una sonrisa de oreja a oreja. All¨ª estaban Jacques Derrida y Pierre Bourdieu, la argelina Assia Djebar, los tunecinos Fethi Benslama y Basset Ben Hassem, la iran¨ª H¨¦lene Kafi, el director del Carrefour des Litt¨¦ratures, Christian Salmon... incluso acudieron los escritores antillanos Edouard Glissant y Patrick Chamoiseau, que el domingo abandonaron ostensiblemente enfadados la reuni¨®n.
Los escritores han realizado una marat¨®n en las ¨²ltimas 24 horas para llegar a un acuerdo. S¨®lo la solidez y prestigio de hombres como Derrida o Bourdieu, la paciencia de otros como Salmon, Jean-Luc Nancy o Phillippe Lacoue-Lab¨¤rthe, el buen hacer de Benslama, el coraje de Susan Sontag y la presencia de un angustiado Salman Rushdie han conseguido el milagro.
Los impulsores de este Parlamento han logrado aunar la urgencia que muchos sienten por llevar adelante este proyecto con f¨®rmulas conciliatorias para los que piden m¨¢s calma y reflexi¨®n.
Primeras decisiones
"Nace una asociaci¨®n internacional de escritores que es la respuesta a un llamamiento que algunos de nosotros hicimos el pasado 31 de julio. Pese a las dudas, hemos acordado finalmente llamarle Parlamento Internacional de Escritores", explic¨® Salmon.
"La primera decisi¨®n que hemos adoptado", a?adi¨®, "es poner en marcha una gran consulta entre los 250 afiliados y entre los que se vayan adhiriendo". Con esta encuesta se sortea uno de los m¨¢ximos peligros al que se enfrent¨® el naciente organismo el pasado domingo: la protesta de muchos escritores que aseguraron que el texto fundacional no explicitaba suficientemente todos los matices y problemas. Benslama explic¨® que cada uno de los 250 socios escribir¨¢ un texto con sus opiniones al respecto. Estos art¨ªculos aparecer¨¢n progresivamente en la revista Litt¨¦ratures, hasta ahora edici¨®n especial del Carrefour y que pr¨®ximamente aparecer¨¢ como publicaci¨®n regular del Parlamento.
La asamblea plenaria del Parlamento se reunir¨¢ en Lisboa en septiembre de 1994 y debatir¨¢ todas las opiniones publicadas. "El resultado ser¨¢ el verdadero documento, la carta fundacional del Parlamento", dijo Benslama.
Derrida explic¨® que la larga elaboraci¨®n de esta carta fundacional no paralizar¨¢ al Parlamento. "?ste funciona desde ya, de manera permanente. Provisionalmente, hasta que la CE regule la reglamentaci¨®n de este tipo de asociaciones internacionales, el Parlamento se acoge al derecho franc¨¦s". Derrida asegur¨® que la nueva asociaci¨®n tendr¨¢ una completa autonom¨ªa e independencia, aunque reciba "subvenciones internacionales o nacionales, todo bajo nuestro control absoluto. Naturalmente, los socios cotizar¨¢n".
Durante el primer a?o el nuevo Parlamento contar¨¢ con el apoyo econ¨®mico y log¨ªstico de la ciudad de Estrasburgo y,del Carrefour des Litt¨¦ratures. Este se compromete a prestarle ayuda econ¨®mica y apoyo log¨ªstico.
Los nuevos parlamentarios aplaudieron la decisi¨®n de la alcaldesa Catherine Trautmann, que anunci¨® el domingo por la noche que "Estrasburgo se declara ciudad-refugio y se compromete a acoger y a apoyar a todos los intelectuales perseguidos". Trautmann invit¨® a todas las ciudades europeas a seguir esta iniciativa y a "crear una red internacional de solidaridad".
El Parlamento ha adoptado ya tres decisiones concretas: 1) colaborar con el comit¨¦ de ayuda a los intelectuales perseguidos en Argelia, que preside Pierre Bourdieu en Par¨ªs. "Les apoyaremos con ayuda econ¨®mica e intelectual". 2) seguir trabajando, con todas las asociaciones culturales implicadas en el proyecto, para que Sarajevo sea Capital Europea de la Cultura. Presionar a las Naciones Unidas para que abra un "corredor cultural", que permita la libre circulaci¨®n de personas, ideas y obras. Celebrar una sesi¨®n del Parlamento en Sarajevo el pr¨®ximo enero. "Si no podemos ir a Sarajevo, pediremos la nacionalidad bosnia", se comprometieron los escritores. 3) presionar a los Gobiernos europeos para que rompan relaciones con Ir¨¢n hasta que se solucione el caso Rushdie.
Los parlamentarios no quisieron dar importancia a las violentas divergencias respecto a Sarajevo surgidas entre las dos escritoras norteamericanas Susan Sontag y Toni Morrison. Mientras que la primera es una ac¨¦rrima defensora de una intervenci¨®n cultural en la capital bosnia, la segunda sostiene que ¨¦sta es "una cuesti¨®n de pol¨ªticos y militares".
Jean-Luc Nancy dijo que el Parlamento "no pretende conseguir la unanimidad de todos sus miembros respecto a Sarajevo. Lo bueno es aceptar e impulsar lo que Sontag propone, as¨ª como todas las iniciativas que surjan". As¨ª, de la misma manera que respalda a la escritora norteamericana, ha aceptado otra propuesta de Toni Morrison y Salman Rushdie: que todas las actividades sean realizadas desde la creaci¨®n y la imaginaci¨®n, "para distinguirnos as¨ª de los pol¨ªticos y para sepultar a los tiranos en el rid¨ªculo".
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