Ochoa y Fellini

Casi al mismo tiempo, la ciencia y el cine han perdido dos columnas b¨¢sicas, y todos, cada uno en la medida de sus talentos, nos hemos quedado un poco hu¨¦rfanos de conocimiento y creatividad. La raz¨®n y el arte, esas dos dimensiones que tanto conforman al hombre contempor¨¢neo, deber¨¢n esperar a otros Ochoa y Fellini para hacer m¨¢s y mejor la vida en general, y la de todos en particular.Maravilla pensar que la mente humana es capaz de escudri?ar los vericuetos de lo m¨¢s peque?o y al mismo tiempo extraer los sentimientos m¨¢s nobles y elevarlos a la categor¨ªa m¨¢s expresiva, all¨ª donde la ternura y el rigor son m¨¢s palpables. Desde la perspectiva de un ciudadano de a pie, estos dos grandes hombres que se nos han ido, la lecci¨®n y la estela de estas dos vidas ayudan a elevarnos a todos en nuestra dignidad de seres humanos y posiblemente sean las mejores pruebas de que sigue siendo posible la solidaridad y la entrega generosa a los dem¨¢s.

El tiempo tambi¨¦n nos trae el recuerdo de Albert Camus. En este camino hacia el invierno se nos fueron algunos de los mejores. Que la paz de los muertos nos invite a la reflexi¨®n y a la esperanza en un mundo mejor.

Con la admiraci¨®n, y tambi¨¦n la congoja que la muerte siempre deja, alzo humildemente mi plegaria por todos los que ponen su talento al servicio de todos. Y que los vientos que corren por esta tierra, aqu¨ª y ahora, se suavicen con la brisa de la estela de estas vidas que ya forman parte de nuestra historia.-