"Si perdemos, me crucificar¨¢n"
La responsabilidad es de todos, no s¨®lo m¨ªa. Cualquiera est¨¢ capacitado para marcar un gol", alega Julio Salinas cuando se le plantea que la afici¨®n le se?ala como el encargado de derrotar a Dinamarca.Pregunta. El partido llega con una gran carga an¨ªmica.
Respuesta. Todos los hogares de Espa?a est¨¢n vibrando. El pa¨ªs lo est¨¢ pasando mal por la crisis, pero da la impresi¨®n de que la gente lo quiere olvidar todo durante esa noche.
P. Su tercer Mundial, en juego. ?Una bonita manera de encarar el final de su carrera?
R. Un Mundial es lo m¨¢ximo. La vida del futbolista tiene unas metas cambiantes. Primero quieres jugar en el equipo de tu barrio o tu pueblo; luego, en el de tu ciudad; despu¨¦s, en el Barcelona o el Madrid; m¨¢s tarde, en la selecci¨®n. Y el Mundial es la culminaci¨®n. ?ste me llega en el momento m¨¢s importante. No soy titular en el Bar?a. Este a?o estoy en blanco. Por eso jugar con la selecci¨®n me hace mucha ilusi¨®n. En mi club tengo demasiado tiempo para pensar. Cuando llega la convocatoria, la afronto con la alegr¨ªa de un ni?o.
P. Usted produce amor y odio, pero parece asumirlo sin agobiarse.
R. De cr¨ªo ya despertaba pasiones enfrentadas. He contado para todos los entrenadores, pero he recibido muchas cr¨ªticas. Las m¨¢s dolorosas, las de cuando jugamos contra Irlanda en Sevilla [0-0]. Fue un mal partido y yo estuve fatal. Tengo recortados algunos art¨ªculos. Ahora nadie habla de eso. Todos me dan como fijo y piensan que voy a lograr los goles del triunfo. He pasado de un extremo a otro, pero ni me sorprende ni me afecta. El mundo de f¨²tbol es tan injusto como desmedido. Si perdemos ma?ana y yo fallo tres tantos, me crucificar¨¢n. Si ganamos y firmo la victoria, a los cielos.
P. Es el precio de ser el actual ¨ªdolo de la selecci¨®n.
R. No me considero ning¨²n ¨ªdolo. Siempre me he definido por darlo todo en el campo. No soy vistoso ni atractivo, pero, por lo menos, soy honrado.
P. Posee el segundo mejor palmar¨¦s de un futbolista espa?ol en activo [el primero, el de Zubizarretal, pero se duda de su capacidad. ?Por qu¨¦?
R. Por mi constituci¨®n f¨ªsica, parezco desgarbado, ap¨¢tico, lento y torpe. Es algo que no tiene nada que ver con que falle lo f¨¢cil y acierte lo dif¨ªcil. Romario ha errado goles cantados y ha metido otros incre¨ªbles, pero nadie dice nada.
P. ?Se transforma en la selecci¨®n?
R. Hay dos factores importantes. Uno, que no llego en las mismas condiciones f¨ªsicas que los dem¨¢s porque no juego en mi equipo. Otro, que lo hago con el triple o el cu¨¢druple de ilusi¨®n. Lo uno nivela lo otro. Yo me paso el mes pensando en el partido de la selecci¨®n.
P. ?Es ¨¦sa la raz¨®n de su gran rendimiento?
R. Siempre he sido un complemento, un tipo secundario. Parece que nunca estoy y luego resulta que estoy. Jam¨¢s hasta ahora se me hab¨ªa considerado como un titular fijo. Ven¨ªa de comparsa. Ya es distinto. Tengo la confianza y eso se nota en el c¨¦sped. Clemente cree en m¨ª, se ha arriesgado por m¨ª y ha recibido hostias por m¨ª. Es algo que me da fuerza. Lo m¨ªnimo que puedo hacer es salir a morir, a que me saquen exhausto con goles o sin ellos.
P. ?Tanto influye la relaci¨®n entre ustedes?
R. Es extraordinaria. Somos amigos y profesionales. Me conoce desde que tengo 16 a?os. Mis goles no son un pago porque no hay ninguna deuda entre ambos. Al d¨ªa siguiente de empatar con Irlanda, Cruyff me dijo que me tomara una semana de descanso. Me qued¨¦ hecho polvo. Sin embargo, Javi ha vuelto a llamarme. Ning¨²n otro seleccionador me habr¨ªa convocado estando de suplente. Sue?o con marcar el gol de la victoria contra Dinamarca. Ser¨ªa un premio para ¨¦l.
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