El empresario Berlusconi niega ser un fascista

Silvio Berlusconi, el presidente del grupo Fi ninvest y gran magnate de la televisi¨®n italia na, que el pasado martes sorprendi¨® a buena parte de la opini¨®n p¨²blica italiana con un doble anuncio, el de su posible dedicaci¨®n a la pol¨ªtica y el de su voto por el candidato neofascista para la alcald¨ªa de Roma, Gian franco Fin?, neg¨® ayer cualquier afinidad suya con el fascismo en el transcurso de una tumultuosa conferencia de prensa en la que perdi¨® los estribos e increp¨® a la sala con gritos de: "Esto es mala fe, y deber¨ªan avergonzarse". "Es estalinista atacar al adversario con mentiras", bram¨® el empresario.

A trav¨¦s del ¨²nico micr¨®fono en funcionamiento, la proclama de Berlusconi convirti¨® la sede de la Asociaci¨®n de la Prensa Extranjera de Roma en un improvisado plat¨® de uno de los reality shows habituales en sus canales de televisi¨®n. En la sala se oyeron abucheos.El enfado de Berlusconi que, en otro orden de cosas, afirm¨® que no tiene ninguna intenci¨®n de dejar la cadena espa?ola Telecinco, se produjo ante la insistencia de los corresponsales en pedir precisiones sobre la versi¨®n que estaba ofreciendo de c¨®mo surgieron sus controvertidas declaraciones en favor del candidato neofascista.

El presidente de Fininvest se hab¨ªa prestado a aclarar las cosas, porque, seg¨²n dijo, la prensa extranjera, como la italiana, hab¨ªa informado de su intervenci¨®n con "sentidos falsos e imprecisiones". Pero el ambiente era poco proclive a la claridad; parec¨ªa m¨¢s propio de un ca¨®tico mitin o de una gran puesta en escena, con la presencia de figuras como el director de cine Franco Zeffirelli y de los principales rostros de la televisi¨®n berlusconiana e incluso de otros canales.

Un pr¨ªncipe de la rancia familia Ruspoli, con abrigo azul de cuello de terciopelo, interrumpi¨® el acto para gritar: "Soy cat¨®lico y los cat¨®licos estamos con Berlusconi", mientras la nube de fot¨®grafos se mov¨ªa de un lado a otro, provocando que el acto se iniciara entre empujones e imprecaciones.

Las razones de Panella

En la calle, el radical Marco Panella esperaba desde hac¨ªa horas la llegada del pol¨¦mico empresario, con una fila de j¨®venes encartelados que portaban la leyenda de "Reflexiona, Silvio, ¨¦stas son nuestras razones". Y los carteles recordaban asuntos como "Refer¨¦ndum sobre el aborto: Fini, contra; Rutelli, con la mayor¨ªa de los romanos"; "Pena de muerte: Fini a favor, Rutelli, contra". Francesco Rutelli, el arquitecto verde crecido en las filas de Panella, es el candidato de esa peligrosa izquierda frente a la que el presidente de Fininvest dijo preferir al neofascista Fin?. Rutelli cuenta con el apoyo de comunistas y antiguos comunistas, pero tambi¨¦n con el del ex democristiano Mario Segni.'To de Berlusconi ha sido un autogol, que amenaza con ser tambi¨¦n un gol para la democracia. El fascismo, en cuanto tal, pertenece al pasado, pero existe el peligro de un equivalente hist¨®rico", dijo Panella en la calle.En ese ambiente, el presidente de Fininvest se present¨® a la prensa "como un empresario que quiere seguir siendolo", y que s¨®lo ha querido aclarar a los pol¨ªticos y a los simples ciudadanos italianos que, en la situaci¨®n actual, la derecha debe unirse. "La democracia no puede ser una izquierda agregada y una izquierda desagregada", coment¨®, tras afirmar que un Gobierno de izquierdas en Italia "ser¨ªa extra?o, por tradici¨®n, a la econom¨ªa de mercado", y explic¨®: "Podr¨ªa llevarnos por la v¨ªa del estatalismo y el proteccionismo".

En cuanto a su anuncio de que tal vez se dedique a la pol¨ªtica, lo explic¨® como "una provocaci¨®n frente a una clase pol¨ªtica que tiene necesidad de que la sacudan". A?adi¨® que no hab¨ªa previsto que pudiera suscitar esa expectaci¨®n, y reiter¨®: "Espero no tenerlo que hacer, porque nada me gustar¨ªa menos", pero tambi¨¦n indic¨® que, si los actuales pol¨ªticos se mostraran incapaces, "no podr¨ªa dejar de considerar un deber dar al pa¨ªs, la experiencia que he acumulado en tantos a?os de trabajo".

Apoyo a Fini

De su declaraci¨®n de apoyo a Fin? no habl¨® Berlusconi espont¨¢neamente, sino en respuesta a una pregunta. Dijo que hab¨ªa sido "una ingenuidad", "f¨²e un error decirlo", se?al¨® en otro momento, porque, como no conoce "los sofismas de la pol¨ªtica", est¨¢ acostumbrado a decir lo que piensa.Al t¨¦rmino de otra rueda de prensa sobre temas comerciales, "cuando hab¨ªa descargado ya toda la adrenalina", una periodista le plante¨® la alternativa entre Rutelli y Fini. Berlusconi, "con unas ideas archiconocidas sobre la izquierda", expres¨® su preferencia por Fini, pero matiz¨®: "Exclusivamente sobre esa alternativa concreta". Y a continuacl¨®n alab¨® al candidato derechista: "Una persona que conozco bien y me parece excelente y de buen sentido".

"Cuando Agnelli, [el presidente de Fiat] expres¨® su apoyo por el candidato de la izquierda al Ayuntamiento de Tur¨ªn, nadie se escandaliz¨®", record¨® Berlusconi.

El magnate italiano tambi¨¦n expres¨® sus dudas de que "el 33% de los romanos que votaron por Fin? el pasado domingo fueran nost¨¢lgicos del fascismo". El empresario ret¨® finalmente, "a tanto est¨²pido y tanta gente de mala fe" a demostrar que en su actividad profesional o privada haya mostrado alguna vez afinidad con la ideolog¨ªa del fascismo.