Encarcelados cuatro soldados por vejaciones y robos a varios novatos
Cuatro soldados veteranos destacados en el polvor¨ªn de Cadrete (Zaragoza) permanecen arrestados en un centro disciplinario militar y a la espera de las posibles penas que se les puedan imponer como presuntos autores de los delitos de vejaciones, robos y amenazas cometidos contra varios j¨®venes que acababan de jurar bandera en el periodo de servicio militar. El Gobierno Militar zaragozano orden¨® el encarcelamiento inmediato de los cuatro individuos, al tener conocimiento de los hechos.Los presuntos agresores irrumpieron el pasado lunes, con s¨ªntomas de estar embriagados, en los dormitorios de los reclutas reci¨¦n incorporados de permiso tras haber jurado bandera. Los soldados veteranos agredieron a algunos de los novatos.
Posteriormente, seg¨²n la versi¨®n oficial de los hechos, les obligaron a entregarles el dinero que tra¨ªan consigo y m¨¢s tarde despojaron a otros soldados de su ropa interior para mofarse delante del resto de los compa?eros.
La agresi¨®n m¨¢s seria la realizaron, seg¨²n las declaraciones por escrito de varios de los testigos, contra un joven recluta al que, tras exigirle que se desnudara por completo, pretendieron obligarle a que se masturbara en su presencia, amenaz¨¢ndole con introducirle el palo de una escoba por el recto, insult¨¢ndole y zarande¨¢ndole.
El incidente fue atajadado con la intervenci¨®n de un suboficial de guardia, que en su ronda habitual descubri¨® la agresi¨®n. El suboficial orden¨® la inmediata detenci¨®n en el cuerpo de guardia de los veteranos.
Posteriormente, las autoridades del acuartelamiento ordenaron que los agresores fueran trasladados a un centro disciplinario, donde quedaron encarcelados mientras se instruye la oportuna investigaci¨®n. Antonio Mart¨ªnez Teixid¨®, jefe de la Regi¨®n Militar que engloba la provincia de Zaragoza, fue informado inmediatamente de los acontecimientos.
Tanto los agredidos como el resto de sus compa?eros, pretenden que se les imponga a los veteranos castigos m¨¢s "serios" que una sanci¨®n de arresto. Adem¨¢s, han manifestado su deseo de que los agresores no vuelvan al mismo acuartelamiento una vez que cumplan la pena que les corresponda.
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