Puntos de encuentro en estilos opuestos

Pese a la concepci¨®n opuesta de estilos, el Barcelona y el Real Madrid presentan similitudes en sus esquemas. Ambos disponen de un goleador asistido por dos jugadores que le sirven los balones. El resto apenas tiene influencia. Por eso el Barcelona apenas acusa tanta rotaci¨®n en el banquillo. Cruyff utiliza 17 jugadores, pero Benito Floro viene manejando esa misma cifra. El desequilibrio entre ambas fuerzas se encuentra en que con los mismos m¨¦todos -pese a que los azulgrana cambian con o sin Romario-, el Barcelona obtiene resultados m¨¢s contundentes.Romario es la punta de lanza del Barcelona, y Zamorano la del Madrid. El primero lleva 13 goles, y el segundo ocho. La diferencia es relativa. Zamorano empez¨® muy mal la temporada pero una vez que encontr¨® puerta, ha marcado tantos goles como Romario: siete en las ¨²ltimas nueve jornadas.

En cuanto a asistentes, el Barcelona tiene 11 jugadores que han dado alg¨²n gol, pero funda mentalmente son dos los encargados de su elaboraci¨®n, Laudrup y Guardiola. ?ste s¨®lo tiene ojos para, Romario, pues le ha dado seis goles. Pero algo empieza a fallar: hace seis partidos que Guardiola no interviene en ninguna jugada de gol. Laudrup est¨¢ mostrando mayor regularidad, pues tiene mejor repartidas sus siete asistencias.

En el Madrid tambi¨¦n dos son los ingenieros, y de tendencia nada imprevisible. Michel sirve los goles a Alfonso (tres de siete) y ¨¦ste a Zamorano (tres de siete). Butrague?o, Hierro y Ramis se reparten el resto. Una curiosidad: el mejor pasador, Michel, no ha puesto todav¨ªa ning¨²n bal¨®n de gol en la cabeza del mejor rematador, Zamorano.

?ste puede ser el punto donde empiece el desequilibrio de dos fuerzas, pues mientras que la sociedad Guardiola-Romario ha funcionado hasta la jornada 11?, la formada por Michel-Zamorano a¨²n no se ha estrenado, aunque estuvo a punto d¨¦ hacerlo en el ¨²ltimo partido ante el Albacete, en el que un centro del madrile?o que persegu¨ªa el chileno acab¨® siendo rematado a gol en su propia puerta por Santi.

En el Bar?a, en cambio, Laudrup. garantiza altas revoluciones en ataque. Si Guardiola le ha dado seis goles a Romario, ¨¦l le, ha puesto cuatro. El goleador del Madrid s¨®lo dispone, en cambio, de un regular asistente, cuando habr¨ªa de tener dos.

En cualquier caso, ambos equipos garantizan espect¨¢culo porque son los que tienen el porcentaje de mayor efectividad en acciones ofensivas. El Barcelona ha conseguido el 78,7% de sus tantos en jugadas elaboradas, y el Madrid apenas sobrepasa el 70%. Los tantos del Barcelona suelen producirse tras lanzamientos verticales al hueco, para que el delantero entre al ¨¢rea con ventaja sobre la defensa, por eso s¨®lo lleva anotado un tanto de cabeza, marcado por Estebaranz. Los del Madrid, en cambio, tienen un desarrollo m¨¢s horizontal al producirse los centros desde las bandas. De esta manera suma seis goles de cabeza, aunque de este equipo es el gol m¨¢s vertical contabilizado hasta ahora. Sucedi¨® en un saque largo de Buyo que recogi¨® Zamorano en San Mam¨¦s; no necesit¨® dar m¨¢s que dos toques al bal¨®n para avanzarlo hasta el ¨¢rea, el tercero fue para rematar.

Desde entonces, y en tres jornadas consecutivas, nadie del Madrid hab¨ªa vuelto a servir un gol. De 16 encuentros, en seis no hab¨ªa marcado, lo que le supuso tres derrotas y otros tantos empates. En dos m¨¢s no consigui¨® m¨¢s que un gol y en ambos perdi¨®. Hasta que lleg¨® el ¨²ltimo partido contra el Albacete, en el que Alfonso y Michel volvieron a asistir a sus compafieros. Para ganar, el Madrid necesita en esta Liga dos goles o m¨¢s. Entonces le marchan bien las cosas. En seis partidos marc¨® dos goles, en uno tres, en otro cuatro y en uno m¨¢s cinco. Todo fueron victorias.

El Barcelona es m¨¢s imprevisible. Cuenta tambi¨¦n con un n¨²mero destacado de partidos en los que no ha marcado, cinco, lo que le supuso tres derrotas. Con un solo gol se qued¨® dos veces, y le bast¨® para ganar, dos veces anot¨® dos y en una de ellas empat¨®, nada menos que cinco veces tres goles y en una ocasi¨®n perdi¨® (4-3 con el Atl¨¦tico) y tres veces hizo cuatro tantos, cantidad ¨¦sta ya insuperable para cualquier rival.

En cuanto al comportamiento de los jugadores, tras un comienzo mod¨¦lico, el Barcelona ya se parece cada vez m¨¢s a los madridistas en cuanto a incorrecciones cometidas. Por el Madrid, Hierro, Alkorta, Nando, Milla y Mart¨ªn V¨¢zquez han sido expulsados, y Ferrer, Guardiola y Nadal por el Barcelona. Han tenido sanciones por haber alcanzado las cinco amonestaciones Hierro, Luis Enrique y Lasa por un bando, y Koeman y Amor por otro. En este cap¨ªtulo de las amonestaciones, el Madrid arriesga m¨¢s porque pone en juego a m¨¢s jugadores con peligro de ser suspendidos por acumulaci¨®n de partidos que los azulgrana (cuatro contra uno).