Estado de bienestar

El llamado Estado de bienestar est¨¢ atravesando serias dificultades, con amenaza de quiebra econ¨®mica, que algunos ven pr¨®xima, y, desde luego, con consecuencias muy negras, si no se produce un cambio de mentalidad.Pienso que en la progresiva construcci¨®n del Estado de bienestar se ha seguido el camino f¨¢cil de prometer y tener que repartir cada vez m¨¢s dinero en efectivo, en vez de garantizar una subsistencia digna a nivel social y en esp¨ªritu de solidaridad.

Tal como est¨¢ ahora montado, el Estado de bienestar es econ¨®micamente insostenible si se desea controlar la inflaci¨®n y mantenerse en unos m¨¢rgenes de competitividad comercial, y tambi¨¦n adolece de la dificultad de poder asegurar la utilizaci¨®n realmente social del dinero repartido.

Sin duda, ser¨ªa mejor un sistema mixto, en el que sobre la cultura de la pensi¨®n en met¨¢lico prevaleciera un sistema de bonificaciones e incluso de gratuidad en los servicios indispensables para una vida digna (vivienda, sanidad, alimentaci¨®n, impuestos, transportes, cultura, diversi¨®n, etc¨¦tera) en el que no s¨®lo el Estado, sino incluso muchas empresas, deber¨ªan participar tomando a su cargo el coste de estos servicios prestados a pensionistas, jubilados, parados, etc¨¦tera. En fin, que el primitivo e infantil lema de distribuir la riqueza debe sustituirse por el m¨¢s realista de asegurar un servicio digno a todos. -