La vigilancia no evita el tercer sabotaje, en un mes en la v¨ªa entre Blanes y Barcelona

Las fuertes medidas de seguridad en la l¨ªnea de tren que une Barcelona con Blanes (Gerona) desplegadas por la Guardia Civil y por Renfe no han logrado impedir que un nuevo acto de sabotaje -el tercero en el ¨²ltimo mes- provocase en la madrugada de ayer el descarrilamiento de un tren de pasajeros que realizaba el trayecto entre las poblaciones de Massanet y L, Hospitalet de Llobregat. El convoy tan s¨®lo hab¨ªa recorrido ocho kil¨®metros cuando vio interrumpida su trayectoria por un corte limpio en uno de los ra¨ªles. Los siete pasajeros, el revisor y el maquinista salieron ilesos.Entre los investigadores policiales y el personal de Renfe se calificaba ayer este nuevo sabotaje como el "m¨¢s dif¨ªcil todav¨ªa". Los autores del siniestro consiguieron burlar las medidas de seguridad y superar si cabe a¨²n m¨¢s sus dos sabotajes anteriores. Repitieron la acci¨®n de Sant Pol -el primer sabotaje realizado el pasado 14 de diciembre- y serraron uno de los dos ra¨ªles. Posteriormente desenroscaron 198 tornillos de 33 traviesas (unos 18 metros de v¨ªa) y forzaron uno, de los extremos del ra¨ªl manipulado hacia el exterior para provocar el descarrilamiento. Previamente hab¨ªan colocado unas pinzas de masa para hacer un puente el¨¦ctrico entre las dos puntas del ra¨ªl para que desde las estaciones no se detectase ninguna anomal¨ªa en la v¨ªa. En el segundo descarrilamiento -el pasado d¨ªa 4-, los autores del sabotaje se limitaron a desenroscar los tornillos y a separar el ra¨ªl con una palanca.

A diferencia de los dos atentados anteriores en el de ayer, los desconocidos saboteadores intentaron serrar tambi¨¦n el segundo ra¨ªl en el que practicaron cuatro o cinco peque?os cortes. Los investigadores interpretan que los saboteadores no llegaron a acabar la acci¨®n porque algo o alguien les interrumpi¨®.

Desde mediados del mes de diciembre la l¨ªnea de cercan¨ªas C-1 (Massanet-L'Hospitalet de Llobregat) est¨¢ fuertemente vigilada por la Guardia Civil. Adem¨¢s, desde el segundo sabotaje una vagoneta recorre cada madrugada la v¨ªa para detectar posibles irregularidades.