Dimisiones en cadena de pol¨ªticos socialistas en los Gobiernos belga y val¨®n por un caso de corrupci¨®n
El viceprimer ministro belga, titular de Comunicaciones y Empresas P¨²blicas, el socialista Guy Coeme, dimiti¨® ayer a mediod¨ªa como consecuencia del esc¨¢ndalo decorrupci¨®n que afecta al partido socialista franc¨®fono por el cobro ilegal de comisiones en una compra p¨²blica de helic¨®pteros militares. Otros dos pol¨ªticos socialistas, el presidente del Gobierno regional de Valonia, Guy Spitaels, y su ministro del Interior, Guy Mathot, siguieron su ejemplo. Estas renuncias ponen a prueba la fr¨¢gil coalici¨®n de centro-izquierda de socialistas y socialcristianos en ambas comunidades.
El viceprimer ministro, Guy Coeme, dimiti¨® ayer tras casi dos semanas de resistencia a la presi¨®n de la opini¨®n p¨²blica y de los partidos flamencos. "He cre¨ªdo err¨®neamente que no hay nada que temer cuando se es inocente", asegur¨® en un comunicado que ley¨® personal mente, en el que denuncia "el encarnizamiento" pol¨ªtico y medi¨¢tico y reconoce no poder "asumir las funciones ministeriales con la serenidad indis pensable". El ex viceprimer mi nistro proclam¨® su inocencia, asegur¨® que "tiene la conciencia tranquila" y termin¨® su alocuci¨®n diciendo: "Volver¨¦".El presidente de los socialistas franc¨®fonos, Philippe Busquin, asegur¨® que guarda "toda su estima y confianza" hacia el pol¨ªtico dimitido. El propio primer ministro, Jean-Luc Dehaene, le remiti¨® una carta en la que le agradece su trabajo y asegura que su dimisi¨®n le honra. "Es la decisi¨®n l¨®gica", asegur¨® un portavoz de los liberales flamencos, el principal partido de la oposici¨®n.
Coeme est¨¢ considerado como sospechoso de falsificaci¨®n de documentos p¨²blicos y de cometer "actos injustos" en la adjudicaci¨®n de un contrato de construcci¨®n y suministro de 46 helic¨®pteros para el Ej¨¦rcito belga en 1988, momento en que ocupaba la cartera de Defensa. Los otros dos pol¨ªticos dimitidos, Spitaels y Mathot, son sospechosos de intentar corromper al ministro y de actuar como intermediarios entre la firma italiana Agusta, que obtuvo el contrato, y el partidosocialista, que recibi¨® a cambio las comisiones ilegales, seg¨²n la versi¨®n de la juez de Lieja V¨¦ronique Ancia.
Spitaels es uno de los elefantes de la pol¨ªtica belga, en activ¨® como ministro desde 1977. Ha sido presidente del partido socialista y vicepresidente del Gobierno belga. Presid¨ªa desde hace dos a?os el Gobierno val¨®n, con sede en Namur, y pretend¨ªa, antes de que se desencadenara el esc¨¢ndalo, obtener la presidencia del Comit¨¦ de las Regiones de la Uni¨®n Europea que debe constituirse en las pr¨®ximas semanas.
El valor del contrato fue de 12.000 millones de francos belgas (48.000 millones de pesetas). Los intermediarios quer¨ªan recibir una comisi¨®n del 2%, adem¨¢s de 800.000 francos destinados a dos agrupaciones socialistas locales. Los aparatos italianos Agusta se hallaban en competencia muy cerrada con el helic¨®ptero alem¨¢n BK117, fabricado por Messerschrmidt-Bolkow-Blohin, y con el Ecureuil franc¨¦s, fabricado por A¨¦rospatiale. Una parte o todo el dinero no lleg¨® nunca a las arcas del partido, seg¨²n la versi¨®n difundida por la juez V¨¦ronique Ancia.
Spitaels y Mathot han visto levantada parcialmente su inmunidad parlamentaria por el Senado belga, mientras que Coeme fue interrogado ayer mismo por una comisi¨®n especial de la C¨¢mara de los Diputados. La prensa neerland¨®fona y los partidos flamencos han reclamado insistentemente el levantamiento total de la inmunidad de los tres pol¨ªticos y su dimisi¨®n, mientras que las ¨²nicas voces matizadas o abiertamente favorables al mantenimiento del fuero parlamentario se han localizado en el lado franc¨®fono.
Cuatro partidos
Nadie pone todav¨ªa en duda el mantenimiento de la coalici¨®n de cuatro partidos de centro izquierda (socialcristianos flamencos y valones y socialistas tambi¨¦n de cada una de las dos comunidades ling¨¹¨ªsticas), pero su enorme fragilidad de principio augura nuevas tensiones. La amenaza de una convocatoria electoral anticipada, que no interesa a ninguna de las fuerzas que componen el Ejecutivo, ha sido hasta ahora el principal motivo de disuasi¨®n que ha cohesionado a los cuatro socios de la coalici¨®n de Gobierno.
El Partido Socialista, a pesar de sus divisiones internas, ser¨ªa el m¨¢s perjudicado, por lo que es de prever que la sustituci¨®n de Coeme y la remodelaci¨®n del Gobierno val¨®n se efect¨²en sin excesivos problemas. Las diferencias entre las dos principales tendencias enfrentadas en el PS est¨¢n en el propio origen del caso de los tres Guy, pues uno de sus jefes de fila, el ex viceprimer ministro Philippe Moureaux, es precisamente uno de los testigos de cargo en el esc¨¢ndalo de los helic¨®pteros.
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