Detenido un cient¨ªfico ruso acusado de revelar secretos sobre armas qu¨ªmicas

El cient¨ªfico Vil Mirzai¨¢nov, encausado por sus revelaciones sobre la producci¨®n de armas qu¨ªmicas en Rusia, fue detenido ayer en su domicilio de Mosc¨² y conducido al calabozo de Lef¨®rtovo. Mirzai¨¢nov, de 59 a?os, no acudi¨® el d¨ªa anterior a su cita con el tribunal moscovita que examina a puerta cerrada las acusaciones que pesan contra ¨¦l de revelar un secreto de Estado.El proceso, cuya legalidad suscita serias dudas, tiene su origen en un art¨ªculo que Mirzai¨¢nov public¨® en 1992 en el semanario Novedades de Mosc¨² e incurre en un c¨²mulo de contradicciones. Para empezar, no existe una lista legal sobre el tipo de informaciones catalogables como secretos de Estado, lo que contraviene los derechos humanos recogidos en la Constituci¨®n rusa. Adem¨¢s, Mosc¨² se comprometi¨® por la convenci¨®n de Par¨ªs a no producir ni utilizar armas qu¨ªmicas, por lo que el proceso supone impl¨ªcitamente reconocer la transgresi¨®n de obligaciones internacionales.

En apoyo de Mirzai¨¢nov, el cient¨ªfico VIad¨ªmir Uglev ha escrito una carta al presidente Bor¨ªs Yeltsin, en la que amenaza con dar a conocer datos sobre la "transgresi¨®n por parte de Rusia" de la convenci¨®n que prohibe las armas qu¨ªmicas. Uglev ha trabajado en el pol¨ªgono de destrucci¨®n de tales armas Shijany-2 (en la provincia de Sar¨¢tov, en el Volga), -seg¨²n afirmaba en su carta, aparecida en Novaia Ezhevnievnaia Gazeta. En ese pol¨ªgono las armas qu¨ªmicas son destruidas mediante explosiones que no cuentan con el visto bueno del programa estatal de destrucci¨®n de esas armas ni han pasado la inspecci¨®n correspondiente. "Esto influye de forma extremadamente, negativa en la salud de la poblaci¨®n de la regi¨®n, lo que es atestiguado por los numerosos casos de enfermedades de origen desconocido en el Volga", se?alaba Uglev.

Ayer, el ministro de Ciencias de Rusia, Bor¨ªs Saltikov, manifest¨® que "emotivamente" est¨¢ con Mirzai¨¢nov, quien no ha revelado ning¨²n secreto porque, seg¨²n Saltik¨®v, es sabido que Mosc¨² ha transgredido sus compromisos internacionales en lo referido a las armas qu¨ªmicas.