Las mujeres copan los juzgados
La invasi¨®n femenina llega tambi¨¦n a la justicia espa?ola
Las mujeres son mayor¨ªa en la nueva promoci¨®n de fiscales. En la ¨²ltima oposici¨®n -cuyos resultados se conocieron el pasado enero- se presentaron 5.000 candidatos para 75 plazas, y ellas consiguieron 51. No s¨®lo son mayor¨ªa, adem¨¢s encabezan la lista. De los 10 primeros opositores aprobados, seis son mujeres. La carrera fiscal, una profesi¨®n considerada "s¨®lo para hombres", que, como la judicatura, abri¨® las puertas para el otro sexo en 1966, est¨¢ en v¨ªas de feminizarse. En numerosos juzgados y audiencias, la proporci¨®n es ya, seg¨²n los expertos, de tres mujeres por cada hombre.
Seg¨²n los ¨²ltimos datos disponibles, de los 1.182 fiscales en activo 713 son hombres y 469 mujeres. De acuerdo con el escalaf¨®n de 1993, de los 3.047 Jueces espa?oles 913 son mujeres."En siete a?os han salido 1.700 nuevos jueces y una cifra similar de fiscales y secretarios de juzgado. Se ha renovado la Administraci¨®n espa?ola de Justicia con gente joven e ilusionada y sobre todo con mujeres. Hay decenas de juzgados con mujeres al frente -juez, secretaria de juzgado y fiscal-", dice Carlos Garc¨ªa Vald¨¦s, director del Centro de Estudios Judiciales, donde se preparan los nuevos fiscales para el ejercicio profesional. Tambi¨¦n se ven cada vez m¨¢s caras femeninas en los cursos para polic¨ªa judicial", a?ade.
Esta abundancia ha compensado los largos a?os de escasez, cuando a la mujer no le estaba permitido acceder a la judicatura ni. a la fiscal¨ªa. Las puertas se abrieron en 1966. Al principio, la proporci¨®n era de una mujer por cada 300 hombres. La catarata lleg¨® en los a?os ochenta. Ahora, la proporci¨®n es de tres mujeres por cada hombre.
El que las mujeres hayan invadido puestos antes vedados para ellas y que arrasen en los primeros puestos de las oposiciones "no es nuevo. Es, adem¨¢s, un fen¨®meno europeo", afirma el fiscal del Supremo Jos¨¦ Mar¨ªa Paz, profesor del Centro de Estudios Judiciales. Paz apunta que la presencia abrumadora de mujeres en las oposiciones a la Administraci¨®n p¨²blica es porque est¨¢ m¨¢s dif¨ªcil su contrataci¨®n en la empresa privada.
Batalla ganada
A las primeras opositoras los tribunales las miraban con disfavor, porque no entraba en su mentalidad que una mujer pudiera ser juez o fiscal. Ahora nadie se plantea el sexo del opositor. Ya es una batalla ganada", dice Mar¨ªa ?ngeles Garc¨ªa, fiscal adscrita a la Secci¨®n de lo Civil del Tribunal Supremo y casada con un fiscal, tambi¨¦n del Supremo. Ella oposit¨® en 1975. Ese a?o hubo seis mujeres que accedieron a la Carrera Fiscal y antes, dos; la primera en 1973.El hecho de que se hayan disparado los porcentajes de presencia de mujeres en las carreras judicial y fiscal es, para Mar¨ªa ?ngeles Garc¨ªa, "un dato a tener muy en cuenta para convencer nos de que se pueden ganar otras batallas que nos quedan, como el acceso a los puestos de m¨¢xima responsabilidad". En cuanto a que la justicia llegue a estar en manos de mujeres, "nunca me ha gustado que las cosas estuvieran en manos de los hombres, pero tampoco pretendo que ocurra lo contrario", dice la fiscal.
Seg¨²n la Ley Org¨¢nica del Poder Judicial, los cargos de ascenso a las presidencias de tribunales superiores y del Tribunal Supremo llevan de 15 a 20 a?os. La mayor¨ªa de mujeres jueces y fiscales a¨²n no tienen la antig¨¹edad requerida, pero "cuando lleguen a ese punto, est¨¢ claro que ellas copar¨¢n los puestos. En las audiencias y los juzgados la justicia ya est¨¢ en manos de mujeres", afirma Garc¨ªa Vald¨¦s. En los grandes ¨®rganos judiciales no hay tantas mujeres "porque es designaci¨®n a dedo". '.'En la oposici¨®n rigen los m¨¦ritos estrictos y no hay cuotas; es una cuesti¨®n de codos y de cabeza", dice.
"Las mujeres son mejores opositoras, rinden mucho", sostiene el fiscal Paz, "las mujeres son m¨¢s resistentes a la prueba de fuego de pasarse de dos a cuatro a?os estudiando entre 12 y 16 horas diarias". Garc¨ªa Vald¨¦s destaca la autoafirmaci¨®n: "Se dicen 'no s¨®lo somos capaces de ser iguales, sino de ser mejores'. Son muy disciplinadas".
Y disciplina es lo que afirman haber aprendido Elena Carrascoso, Yolanda Dom¨ªnguez y Cristina P¨ªrfano, tres de las opositoras triunfantes. Aunque adelgazaron y vivieron una vida casi monacal, el esfuerzo mereci¨® la pena. "Es una inversi¨®n de tiempo y sacrificios, pero es una recompensa para toda la vida", dicen Elena (segundo puesto) y Yolanda (sexto puesto). "Una oposici¨®n es una aventura, llena de incertidumbre. Otros se van de safari", a?ade Cristina (quinto puesto).
Tienen unas ganas locas de ejercer, pero hasta julio no tomar¨¢n posesi¨®n. "Los profesores dicen que estamos muy bien preparadas", dicen satisfechas. Quieren contribuir a "dar una nueva imagen de la figura del fiscal". Opinan que sobre el tema "hemos visto demasiadas pel¨ªculas norteamericanas". "No es el malo del juicio, el acusador", dice Elena Carrascoso, madrile?a de 26 a?os, hija de abogado.
Yolanda Dom¨ªnguez, vallisoletana de 27 a?os, oposit¨® a?o y medio. "Al terminar la carrera trabaj¨¦ en un banco, pero las mujeres ¨¦ramos las ni?as de los recados. Entonces me decid¨ª por la oposici¨®n. Fiscal me gusta. Es un trabajo din¨¢mico, est¨¢s en contacto con la gente...".
"En los despachos de abogados las condiciones son miserables: 25.000 pesetas al, mes trabajando todo el d¨ªa, incluso haciendo guardias por las noches. Prefer¨ª opositar y formarme m¨¢s en Derecho", dice Cristina P¨ªrfano, madrile?a, 26 a?os. "Ten¨ªa claro que lo m¨ªo son los tribunales".
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