Desde el dominio de lo p¨²blico
Cada d¨ªa con mayor nitidez parece afirmarse la idea de que los conductos habituales del arte se est¨¢n agotando o, al menos, no pueden cubrir la totalidad de las exigencias creativas de los artistas. Frente a la respuesta conceptual de desmaterializar el arte, los creadores del arte p¨²blico pretenden una obra que por sus caracter¨ªsticas reclama una materialidad y espacialidad que desborda las tradicionales salas de museos y galer¨ªas.Por esta raz¨®n, el espacio urbano y el medio rural cobran un renovado inter¨¦s para los artistas actuales. Pero tanto los comitentes p¨²blicos como los artistas y los ciudadanos adolecen de suficiente experiencia para encargar, crear y disfrutar, respectivamente, este nuevo tipo de obras. Por eso, cualquier iniciativa, como la exposici¨®n Espacios p¨²blicos. Sue?os privados, que ayude a acumular experiencias con respecto al arte p¨²blico, debe ser bien recibida.
Espacios p¨²blicos
Sue?os privadosSala de Plaza de Espa?a de la Comunidad de Madrid. Plaza de Espa?a, 8. Madrid. Hasta abril.
Esta muestra es necesariamente interesante porque recoge veinte trabajos de trece artistas present¨¢ndolos en la fase de proyecto para intentar mostrar tanto las ideas como los m¨¦todos de elaboraci¨®n, es decir, cuando se encuentran en ese punto en que los trabajos tienen toda la frescura creativa y no han tropezado a¨²n con las condiciones de la dura realidad que plantean la ejecuci¨®n, el enfrentamiento con el medio real y el desgaste del tiempo.
Dada la ausencia de exposiciones sobre arte para espacios p¨²blicos, es posiblemente ¨¦sta una de las muestras m¨¢s interesantes de la temporada, no tanto por las obras en s¨ª como por el tema que poco a poco va calando en la sensibilidad y la conciencia de los artistas y de la sociedad espa?ola.
Pero la falta de experiencia, a la que alud¨ªamos antes, se denota tambi¨¦n en los comisarios de la muestra, que se han limitado a elegir un grupo de artistas, muy conocidos y significativos todos ellos, pero que no han profundizado en los contenidos, problemas y experiencias de un tipo de arte que, a pesar de su novedad expositiva en Espa?a, tiene una larga tradici¨®n te¨®rica. Un escueto texto de presentaci¨®n en el cat¨¢logo sin ning¨²n estudio sobre el fen¨®meno del arte p¨²blico, resta inter¨¦s a una muestra que deber¨ªa haber sido el inicio de un necesario debate.
Con todo, desde el punto de vista de las obras, hay que destacar algunos de los trabajos: una fuente para Bruselas, de Miquel Navarro, en la l¨ªnea de sus anteriores experiencias urbanas; una obra de Sergi Aguilar, formada por cuatro inmensas siluetas en una playa de Tarragona; una pieza para la ciudad francesa de Auch, de Jaume Plensa.
Eva Lootz y Mitsuo Miura, desde la mejor tradici¨®n del land art, presentan dos proyectos interesantes, as¨ª como la met¨¢fora ir¨®nica sobre la restituci¨®n de la naturaleza de Desescultura de Perejaume. Por su parte, Soledad Sevilla tambi¨¦n trata de una restituci¨®n, la del patrimonio cultural, con su recreaci¨®n del expoliado claustro del palacio de V¨¦lez Blanco.
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