La gran pesca ol¨ªmpica

La pel¨ªcula de los Juegos de Lillehammer tiene una segunda parte, como cualquier superproducci¨®n que se precie de tal. Han comenzado los Juegos Publicitarios, especialmente en Estados Unidos. Los h¨¦roes y los villanos han regresado a Norteam¨¦rica, algunos con cheques millonarios bajo el brazo. La estrella es Naney Kerrigan, coprotagonista de uno de los sucesos m¨¢s escandalosos en la historia de los deportes ol¨ªmpicos. Su papel de v¨ªctima del contubernio tejido por el entorno de su principal adversaria, Tonya Harding, ha sido m¨¢s decisivo en su actual ¨¦xito publicitario que la medalla de plata conseguida en la. prueba de patinaje art¨ªstico. En este caso, la plata vale tanto como el oro. "Nancy Kerrigan ser¨¢ la ¨²nica deportista americana en la historia de las Olimpiadas que consiga dinero por una medalla de plata", dijo Andrew Woolf, presidente de la agencia de deportistas World Class Sports.Tras su regreso de Noruega, el primer trabajo de Nancy Kerrigan ha sido ponerse a disposici¨®n de la factor¨ªa Disney. En Disneyworld se celebr¨® una recepci¨®n en su honor, y no faltaron los focos y las c¨¢maras para retratar a Kerrigan con Mickey y Donald. La patinadora recibir¨¢ dos millones de d¨®lares (unos 280 millones de pesetas) por un contrato que incluye, entre otras cosas, una pel¨ªcula de su vida para la televisi¨®n.

Poco despu¨¦s de sufrir la agresi¨®n que estuvo a punto de impedir su presencia en Lillehammer, Kerrigan firm¨® contratos con Sopas Campbell, Reebok, Xerox, Seiko, Evian, Aerol¨ªneas Northwest y la revista Cosmopolitan. Ahora acaba de firmar con Disney y la compa?¨ªa de cosm¨¦ticos RevIon. La cifra de total de ganancias se estima entre 10 y 20 millones de d¨®lares (entre 1.400 millones de pesetas y 2.800). "El cielo es el l¨ªmite para Kerrigan", manifest¨® Arthur Kaminsky, director de la agencia Atletas y Artistas. "No conozco a nadie que haya recibido tanta publicidad positiva en un espacio tan corto de tiempo", a?adi¨® Kaminsky.

El papel de villana en el culebr¨®n del patinaje correspondi¨® a Tonya Harding. Pese a las sospechas que se ciernen so bre su posici¨®n en la trama que desemboc¨® en la agresi¨®n a Kerrigan, Harding ha recibido el apoyo de amplios sectores populares. Pero en su contra juega su fama de intrigante y el oct¨¢vo puesto que consigui¨® en Lillehammer. Hasta el momento, tienen graves dificultades para obtener una parte del pastel publicitario.

Sus representantes se han puesto en contacto con empresas caracterizadas por su desinhibici¨®n, como la marca de pantalones vaqueros No Excuses. La firma ha utilizado a figuras tan controvertidas como Donna Rice, amante del ex senador Gary Hart, para anunciar sus productos. Pero Tonya Harding parece una apuesta excesiva. "Por ahora no tenemos la intenci¨®n de utilizar su imagen. Queremos a alguien un poco m¨¢s querido", se?al¨® Dari Marder, vicepresidente de la secci¨®n de publicidad de No excuses.