El sector privado podr¨¢ gestionar las televisiones locales

. Las empresas privadas podr¨¢n explotar las televisiones locales por ondas terrestres en el caso de que los ayuntamientos no quieran gestionarlas de forma directa, aunque necesitar¨¢n la licencia de las comunidades aut¨®nomas. ?sta es una de las condiciones que figuran en el borrador de proyecto de ley que presentar¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 28 el ministro de Obras P¨²blicas, Transportes y Medio Ambiente, Jos¨¦ Borrell, al Consejo Asesor de Telecomunicaciones.

El ¨¢mbito de prestaci¨®n del servicio de televisi¨®n local, considerado como p¨²blico, se limitar¨¢ exclusivamente al casco urbano del n¨²cleo principal de poblaci¨®n de cada municipio. Es decir, s¨®lo habr¨¢ en principio una estaci¨®n de televisi¨®n local por cada t¨¦rmino municipal. No obstante, en poblaciones de un gran n¨²mero de habitantes, que no se especifica en el borrador, podr¨¢ establecerse m¨¢s de una estaci¨®n transmisora si existe disponibilidad en el espectro radiol¨¦ctrico. Las frecuencias las asignar¨¢ previamente el Ministerio de Obras P¨²blicas, Transportes y Medio Ambiente.La ausencia de frecuencias disponibles en una poblaci¨®n supondr¨¢ la imposibilidad de montar una estaci¨®n de televisi¨®n local en esa demarcaci¨®n. Por otra parte, la planificaci¨®n de las frecuencias debe dar prioridad, seg¨²n el proyecto de la Administraci¨®n, a aquellas frecuencias que garanticen una cobertura adecuada de la poblaci¨®n por parte de las televisiones p¨²blicas, tanto estatales como auton¨®micas, y de las televisiones privadas.

En relaci¨®n con los contenidos, las televisiones locales no podr¨¢n en ning¨²n caso emitir simult¨¢neamente la misma programaci¨®n ni formar parte de cadena de televisi¨®n alguna. Por otra parte, deber¨¢n emitir como m¨ªnimo una hora diaria y 15 horas semanales. Las comunidades aut¨®nomas podr¨¢n elevar los tiempos m¨ªnimos de emisi¨®n. En relaci¨®n con los contenidos de las cadenas, las estaciones locales deber¨¢n ocuparse principalmente de la promoci¨®n de los intereses locales, fomentando la participaci¨®n de grupos sociales de car¨¢cter local.

La gesti¨®n indirecta del servicio se otorgar¨¢ por concurso p¨²blico, y la participaci¨®n extranjera en la empresa concesionaria no podr¨¢ superar directa o indirectamente el 25% del capital de la sociedad. Por otra parte, ninguna persona f¨ªsica o jur¨ªdica podr¨¢ poseer directa o indirectamente m¨¢s del 50% de las acciones de dos o m¨¢s sociedades concesionarias que operen en municipios de una misma comunidad aut¨®noma.

El t¨ªtulo habilitante para la prestaci¨®n del servicio se otorgar¨¢ por un periodo m¨¢ximo de cinco a?os, que podr¨¢ prorrogarse en funci¨®n de las disponibilidades del espectro radioel¨¦ctrico y del desarrollo de la televisi¨®n por cable. Las televisiones locales de explotaci¨®n comercial pagar¨¢n un canon a la Administraci¨®n. Estar¨¢n exentas de este canon las que funcionan sin contraprestaci¨®n econ¨®mica.

En principio, el ministro Borrell no ten¨ªa intenci¨®n de legislar sobre las televisiones locales que se transmiten por ondas hercianas. Posteriormente quiso incluirlas en la ley de cable y obligarlas a reconvertirse. Ahora, entre las razones que a aduce el ministerio est¨¢ la sentencia del Tribunal Constitucional del 31 de enero que otorga el derecho de emitir a cadenas ya existentes y la pr¨®xima presentaci¨®n de un proyecto de ley del Parlament¨® catal¨¢n sobre televisi¨®n local.