Aranguren defiende el esp¨ªritu de los a?os 60 al presentar sus obras completas

"Quiero tener la esperanza de que los j¨®venes de hoy van a significar algo diferente de lo establecido y salir de esa pasividad que ha marcado a las generaciones posteriores a la d¨¦cada de los sesenta", dijo ayer el fil¨®sofo Jos¨¦ Luis Aranguren (Avila, 1909) durante la presentaci¨®n en la Fnac, de Madrid, del primer tomo de sus obras completas. "Me gusta el hecho de que los j¨®venes hayan vuelto a la actitud de insumisi¨®n respecto al servicio militar", continu¨® el escritor. "Esto significa un avance y est¨¢ en la l¨ªnea de lo que nosotros concebimos en los a?os sesenta".Para Jos¨¦ Luis Aranguren, la pasividad ha sido fruto de una situaci¨®n econ¨®mica m¨¢s c¨®moda, pero la crisis puede hacer que las cosas ya no sean tan c¨®modas, y que los j¨®venes recuperen la rebeld¨ªa que les hace falta. La crisis econ¨®mica de nuestro pa¨ªs es inseparable de la crisis moral".

Aranguren -Premio Nacional de Literatura en 1989 y catedr¨¢tico de ?tica en la Universidad Complutense de Madrid, de donde fue expulsado en 1966 por apoyar la revuelta estudiantil-, tambi¨¦n a?or¨® el Concilio Vaticano II y record¨® al Papa Juan XXIII. "El cristianismo siempre ha estado en crisis, pero aquella ¨¦poca fue la mejor".

La presentaci¨®n de las obras completas de Jos¨¦ Luis Aranguren, publicadas por la Editorial. Trotta -a la que el fil¨®sofo agradeci¨® su "osad¨ªa"-, corri¨® a cargo del poeta y profesor universitario Agust¨ªn Garc¨ªa Calvo, quien se refiri¨® a su colega -fue expulsado de la Universidad al mismo tiempo que Aranguren y por los mismos motivos- como la persona que "personifica como nadie la paradoja de la apertura, de la amplitud inmensa, de la manga ancha para cualquier tipo de rebeld¨ªa".