Insoportable subproducto

The Beverl hillbillies

Directora: Penelope Spheeris.

Guionistas: Lawrence Konner, Mark Rosenthal, Jim Fisher, Jim Staahl.

Fotograf¨ªa: Robert Brinkman. M¨²sica: Lalo Schifrin. Estados Unidos, 1993.

Int¨¦rpretes: Jim Varney, Cloris Leachman, Lily Tomlin, Rob Schneider. Estreno en Madrid: Palacio de la M¨²sica, T¨ªvoli, Albufera Multicines, Multicines Pozuelo.

Siempre han funcionado bien las historias de personajes trasladados desde su medio natural a otro m¨¢s hostil con el que no tienen la menor relaci¨®n, sobre todo con vistas a la taquilla. Baste como muestra dos ejemplos tan diferentes como Paco Mart¨ªnez Soria en La ciudad no es para m¨ª (1965), de Pedro Lazaga, sobre las aventuras de un paleto en Madrid, y Paul Hogan en Cocodrilo Dundee (1986), de Peter Faiman, en torno a las andanzas de un primitivo australiano en Nueva York.En el caso de R¨²sticos en Dinerolandia su origen es una serie de televisi¨®n de los a?os sesenta, emitida en Espa?a bajo el t¨ªtulo Los nuevos ricos, pero el esquema es exactamente el mismo. La ¨²nica diferencia es que no se trata de un individuo, sino de una familia, los Clampletts, integrada por un padre viudo, su hija, una abuela y un sobrino, trasladados desde las monta?as de Arkansas hasta la refinada Beverly Hills. Sin olvidar que adem¨¢s todo gira en torno a su repentino enriquecimiento al descubrirse una gran bolsa de petr¨®leo en sus lejanas tierras.

Tras un pr¨®logo que expone la situaci¨®n con un gran poder de s¨ªntesis, la acci¨®n se estanca en los intentos de una absurda mujer y su novio por hacerse con la cuantiosa fortuna de los monta?eses por medio de una boda. Y, como en las comedias televisivas de situaciones, que es lo que en realidad es, no ocurre nada m¨¢s, una y otra vez la misma situaci¨®n gira sobre s¨ª misma, con malas ocurrencias, tontos chistes, etc¨¦tera.

Digna del t¨ªtulo

El resultado es un insoportable subproducto, digno del terrible t¨ªtulo castellano que le han impuesto los distribuidores. M¨¢s que una pel¨ªcula, parece un cruce muy mal hecho entre serie de televisi¨®n e historieta gr¨¢fica que, en cualquier caso, no se comprende c¨®mo se estrena en plena temporada quitando el sitio a cualquier producci¨®n europea, que, en el peor de los casos, siempre ser¨ªa mejor.

El Filme ha sido producido y dirigido por Penelope Spheeris, una especialista en convertir viejas series de televisi¨®n en terribles pel¨ªculas, tal como tambi¨¦n demostr¨® con creces en Wayne's world, ?qu¨¦ desparrame! (1991). Al parecer se trataba de que R¨²sticos en Dinerolandia fuese una comedia, pero el resultado es un insoportable subproducto cinematogr¨¢fico donde nada funciona.

Desde unos actores exagerados que hacen que sus personajes carezcan de cualquier atisbo de consistencia hasta una situaci¨®n de comedia una y otra vez desaprovechada.