Verdades a medias

El Gobierno recibi¨® ayer el encargo de llevar a cabo los acuerdos del Parlamento con la credibilidad deteriorada por sus incumplimientos de los acuerdos de otros debates anteriores. La diferencia radica ahora en que depende de los esfuerzos del Ejecutivo por atajar la corrupci¨®n el que los nacionalistas le suministren la ayuda para su supervivencia, para seguir en el poder. Gonz¨¢lez lleg¨® al debate sobre el estado de la naci¨®n en marzo de 1992 con s¨®lo ocho resoluciones cumplidas de las 17 aprobadas por el Congreso el a?o anterior.

Si la corrupci¨®n no hubiera polarizado todo el debate parlamentario, los socialistas podr¨ªan haber aprovechado para decir que han cumplido en buena medida la mayor¨ªa de las 39 resoluciones que el Congreso dirigi¨® al Ejecutivo el d¨ªa 25 de marzo de 1992. Claro que, escaldado por experiencias anteriores, el Grupo Socialista se cuid¨® entonces de que los acuerdos quedaran formulados en t¨¦rminos m¨¢s gen¨¦ricos. Tan gen¨¦ricos en algunos casos que cuando ayer este diario consult¨® a los grupos parlamentarios, dos personas del mismo grupo expresaron opiniones contradictorias sobre la ejecuci¨®n de una misma medida.

Los pronunciamientos m¨¢s n¨ªtidos fueron los de Luis Mardones, de las Agrupaciones Independientes Canarias, que estim¨® que se hab¨ªan cumplido casi en su totalidad las propuestas que hizo y que le fueron aceptadas por el PSOE. En la orilla opuesta, la portavoz de Izquierda Unida, Rosa Aguilar, consider¨® casi totalmente, incumplidas las peticiones que hizo IU. Desde la perspectiva de esa coalici¨®n, la ausencia de un acuerdo entr¨¦ el Gobierno, los sindicatos y los empresarios deja en papel mojado las numerosas reuniones habidas, por mucho que esas conversaciones cumplan uno de los acuerdos del anterior debate sobre el estado de la naci¨®n.

Para Enrique Fern¨¢ndez-Miranda, portavoz adjunto del Grupo Popular, el Gobierno ha incumplido la mayor¨ªa de sus compromisos, mientras que desde el Ejecutivo s¨®lo se admite el fracaso en el intento de recuperar la soberan¨ªa de Gibraltar.

Pero el an¨¢lisis detenido ofrece una radiograf¨ªa mucho m¨¢s compleja. En opini¨®n de Miquel Roca, portavoz de CiU, el Gobierno no ha reducido la Administraci¨®n perif¨¦rica del Estado, ni ha actuado con celeridad para la adecuaci¨®n del IVA a la armonizaci¨®n comunitaria. Para I?aki Anasagasti, portavoz del PNV, el Ejecutivo no ha aportado soluciones a la reconversi¨®n de empresas con especial impacto en el tejido industrial de la comisa cant¨¢brica, ni ha acelerado la construcci¨®n de carreteras en esa zona norte?a.

Es cierto que el Gobierno ha aprobado, como se le pidi¨® hace dos a?os, un Plan Hidrol¨®gico, y que ha remitido al Parlamento una reforma del mercado de trabajo, y que ha elaborado una Ley de Arrendamientos Urbanos. Pero tambi¨¦n lo es que ha quedado embarrancada en aguas de la anterior legislatura el proyecto de Ley de Huelga, y que el funcionamiento del Inem no debe ser muy eficaz como mediador para ofrecer empleo cuando han sido legalizadas las agencias privadas de colocaci¨®n.