Medio ambiente

Enciendo la tele y me voy a ETB-2 (segundo canal vasco). Un documental. Veo a un grupo de energ¨²menos que se acercan con picos a un peque?o reba?o de focas, all¨¢ por los hielos noruegos. Las focas son tan sensibles e inteligentes como cualquier perro dom¨¦stico. Una hembra sigue con sus grandes ojos el pico met¨¢lico que desnuca a su cr¨ªa; mira hacia atr¨¢s con p¨¢nico (parece ebria de dolor, grita sin poder defenderse por su torpeza) y sus ojos no pierden a esos sanguinarios monos que han llegado de ninguna parte. Cambia el escenario y otra toma del reportaje hace intuir el destino que ha corrido el animal: montones de focas abiertas en canal, ?muchas de ellas vivas!, en la cubierta de un barco.La responsabilidad no es exclusiva de esos abortos vivientes (hijos de mam¨¢ Gestapo y pap¨¢ analfabetismo) que van por la vida de cazadores intr¨¦pidos (adem¨¢s est¨¢n en todas partes, no s¨®lo en Noruega). En esta ocasi¨®n, las autoridades noruegas son arte y parte: esgrimen no s¨¦ qu¨¦ plan de regulaci¨®n de especies marinas. Casualmente, ellos son los que siguen masacrando ballenas. Exquisitos y civilizados n¨®rdicos, consiguen envenenar a la poblaci¨®n (que est¨¢ deseando tragar sapos) y ponerla en contra del inspector que ha denunciado las matanzas. All¨¢ y ac¨¢ seguimos por "buen camino" en pol¨ªticas de medio ambiente: los pescadores del Cant¨¢brico y del Mediterr¨¢neo ya lo est¨¢n pagando. A los dem¨¢s ya nos llegar¨¢.

Y, como somos muy listos, la pr¨®xima vez votaremos a un partido que quiere privatizar hasta el agua de los r¨ªos, urbanizar y especular a todo tren, diciendo que van a crear riqueza (la que siempre han prodigada ellos, la del 5% de la poblaci¨®n).-