"La locomotora del mundo son los pa¨ªses en desarrollo"
Michel Canidessus -siete a?os al frente del FMI- ha pasado esta semana dos d¨ªas en Madrid para preparar la asamblea que el organismo celebrar¨¢ en esta ciudad el pr¨®ximo oto?o. Su visita se ha caracterizado, fundamentalmente, por el apoyo que ha dado al Gobierno y por un optimismo que desvela su esperanza en una pr¨®xima recuperaci¨®n de la econom¨ªa.Pregunta. El problema m¨¢s acuciante de los pa¨ªses desarrollados es el desempleo. Adem¨¢s, un mayor crecimiento no es seguido tan inmediatamente como hace a?os de una reducci¨®n del paro. ?Por qu¨¦ es as¨ª?
Respuesta. Eso es particular: mente verdad en Espa?a, y lo lamento. Si el crecimiento no se acompa?a de creaci¨®n de empleo es que hay -en alguna parte un obst¨¢culo. Cuando se analiza el mercado laboral espa?ol se ve que antes de las reformas que muy oportunamente el Gobierno ha introducido hab¨ªa una acumulaci¨®n de rigideces que explican perfectamente el miedo a contratar que ten¨ªan las empresas. Hab¨ªa que atacar ese problema y el Gobierno lo ha hecho con valent¨ªa. Si adem¨¢s se intensifica la formaci¨®n profesional, en el futuro el crecimiento espa?ol ser¨¢ creador de empleos.
P. El Fondo se muestra muy a
R- favor del- sistema de relaciones laborales que impera, por ejemplo, en Estados Unidos.
R. Bueno, est¨¢ a favor d la flexibilidad. Esto no supone su gerir sin respeto por la cultura de los pa¨ªses que se importe el mo delo americano. No. Hay que respetar el contexto en el cual uno se halla, pero no cabe duda de que el sistema espa?ol hay que flexibilizarlo.
P. ?Esa flexibilizaci¨®n no ¨ªni plicar¨ªa, ya no s¨®lo en Espa?a, sino en otros pa¨ªses de Europa, perder parte de la protecci¨®n so cial que ha caracterizado la cultura europea?
R. No est¨¢ en nuestro ¨¢nimo el que se abandone un sistema de protecci¨®n social que es una ben dici¨®n en nuestras econom¨ªas. Lo que hay que hacer es pagarpor ¨¦l y pagar de una manera que Michel Camdessus. no destruya empleos. Hay que compatibilizar un dinamismo decreaci¨®n de empleo con la finan ciaci¨®n de la protecci¨®n social y que ¨¦sta se distribuya de tal forma que no obstaculice el crecimiento. ?sta debe ser la gran tarea de los a?os que vienen. Pero es larga y dificil, porque obliga a un gran esfuerzo para reducir la parte del coste social que se incorpora al coste laboral, diferenciando cuidadosamente, por ejemplo, el gasto de salud, cuya evoluci¨®n es dif¨ªcil de parar. Todo esto implica tambi¨¦n que al negociar salarios, empleados y empresas tengan en su mente la necesidad de limitar el coste del trabajo al nivel que permita maximizar el empleo.
P. ?Est¨¢ a favor de la reducci¨®n de jornada?
R. Sin reducci¨®n de salario, en absoluto. Y con reducci¨®n de salario puede ser una f¨®rmula de reparto de trabajo. Pero sirve en ocasiones muy coyunturales.
P. El Fondo alienta a los Go biemos a flexibilizar el mercado de trabajo, pero se echan en falta alusiones tambi¨¦n a la asunci¨®n de responsabilidades por parte de empresarios y sindicatos.
R. Todos tienen que sentirse part¨ªcipes de la estrategia global de un pa¨ªs. Adem¨¢s, me parece imprescindible que el di¨¢logo enre sindicatos y empresas se haga m¨¢s real¨ªsta, que a¨²nen fuerzas para tratar de ayudar a la otra parte a realizar sus propias ambiciones. Es importante que lasempresas hagan todo lo posiblepara facilitar la formaci¨®n de sus empleados y que ¨¦stos ayuden a aumentar la productividad, puesto que ello justifica el aumento de los salarios.
P. ?C¨®mo puede Europa competir con pa¨ªses,como los asi¨¢ticos, donde los salarios son 20 veces m¨¢s bajos?R. Pues porque tambi¨¦n hay diferencias inmensas de produc tividad del trabajo y de capacita ci¨®n de la mano de obra. Conste adem¨¢s, que la destrucci¨®n de empleo en Europa que se pueda vincular a competencia de pa¨ªses de salarios bajos es muy limitada.
P. Alemania atraviesa una etapa de recesi¨®n. ?Seguir¨¢ siendo la locomotora de Europa?R. La locomotora de Europa ya no es Alemania. La locomotora del inundo' ahora son los pa¨ªses en desarrollo. Si hay crecimiento en el mundo es porque durante estos a?os de recesi¨®n pa¨ªses en desarrollo, 35 o 40, aplicando las buenas orientaciones del Fondo Monetario Internacional, han sido capaces, a pesar de la recesi¨®n de Europa y de Am¨¦rica, de crecer fuertemente. Ello ha evitado un crisis global.P. ?Qu¨¦ papel cree entonces que cumplen los pa¨ªses emergentes de Asia, que est¨¢n experimentando fort¨ªsimos crecimientos?R. Nos dan un ejemplo a seguir. Si crecen es porque aceptan abrirse, hacen un esfuerzo para desarrollar su ahorro, capacitan su mano de obra y se esfuerzan en mejorar sus formas de Gobierno. No estoy diciendo a los pa¨ªses de Europa que tengan que asiatizarse, pero tienen que esforzarse en mantener d¨¦ficit p¨²blicos limitados, abrir barreras y agilizar la econom¨ªa.P. Espa?a mantuvo durante a?os una pol¨ªtica monetaria restrictiva, muy aplaudida por el Fondo. Sin embargo, muchos analistas creen que una peseta excesivamente fuerte provoc¨® gran parte de la crisis. ?Cu¨¢l es su opini¨®n?R. ?ste ha podido ser en algunos momentos el problema del pasado de Espa?a, pero ahora la competitividad monetaria de la econom¨ªa espa?ola excelente. En cualquier caso, de ello se benefici¨® la econom¨ªa espa?ola porque se redujo la inflaci¨®n.
P. Se cumplen ahora 50 a?os del acuerdo de Bretton Woods que dio origen al Fondo Monetario. -?Cu¨¢l ser¨¢ en adelante el papel de este organismo?
R. Orientamos nuestros esfuerzos en cuatro direcciones: reforzarla supervisi¨®n en la coordinaci¨®n de pol¨ªticas econ¨®micas; fortalecer el Sistema Monetario Europeo; continuar eliminando las restricciones cambiar¨ªas y adaptar los mecanismos de ayuda.
P. Usted ha planteado la aprobaci¨®n de nuevos servicios financieros del Fondo. ?No ha pensado el FMI acudir al mercado para financiarse?
R. Utilizar¨¦ todos los recursos disponibles antes de iral. mercado. Incluso propondr¨ªa ampliar el capital del Fondo. Hoy son suficientes los 180,000 millones de d¨®lares con los que contamos, pero si desarrollamos como queremos nuestro apoyo a pa¨ªses de econom¨ªa en transici¨®n, entonces s¨ª puede hacer falta.
P. ?Es posible extender f¨®rmulas como la del SME a otros bloques del mundo?
R. Tengo mucha simpat¨ªa por
P este tipo de f¨®rmulas, pero - hay que recordar el coste que se paga para converger en t¨¦rminos de crecimiento. Si los Gobiernos est¨¢n decididos -a aceptar estas disciplinas y costes, el Fondo estar¨¢ entusiasmado en ayudar.
P. Se acusa al - FMI de seguir al dictado las decisiones del G-7, los siete pa¨ªses m¨¢s ricos del mundo.
R. Nunca he sentido ese dictado..
P. ?Qu¨¦ pa¨ªses podr¨¢n acudir al nuevo fondo que usted propone para abastecerse de reservas en caso de que su moneda sufra un ataque especulativo?
R. Todos aquellos que, aplicando una pol¨ªtica monetaria y cambiaria correcta, puedan desestabilizarse por ese ataque.
P- ?Se incluyen los industrializados?
R, . ?Por qu¨¦ no?P. ?Cree que hubiera sido un instrumento ¨²til en las ¨²ltimas crisis del SME?
R. ?Cree usted que los tipos de cambios que se atacaron en esos momentos estaban todos justificados? La respuesta es no. El sistema en el que estamos pensando s¨®lo vale cuando hay convicci¨®n en una instancia neutral como la nuestra de que la relaci¨®n entre la posici¨®n macroecon¨®mica y monetaria de un pa¨ªs y su tipo de cambio es correcta.
P. ?Los tipos de cambio en el SME se ajustan m¨¢s ahora a las, realidades econ¨®micas de los pa¨ªses?
R. Estamos en una situaci¨®n mucho m¨¢s satisfactoria.
P. ?Cu¨¢nto tiempo habr¨¢ que mantener la actual banda de fluctuaci¨®n del 15% en el SME?
R. S¨®lo Dios lo dir¨¢... y el mantenimiento de esfuerzos de convergencia, la rapidez con que la recuperaci¨®n se confirme y la sabidur¨ªa de los que tienen responsabilidades en ese sistema.
P. ?Cree que es factible la uni¨®n econ¨®mica y monetaria para el a?o 97,o 99?
R. Es factible alcanzar las metas de Maastricht.
P. ?Espa?a podr¨ªa ir en el grupo de cabeza de la UEM?
R. No veo por qu¨¦ no, si contin¨²a con su esfuerzo de ajuste estructural, de disciplina monetaria y macroecoh¨®mica.
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