Bonnie Raitt, en defensa del blues
La cantante y guitarrista californiana, incluye a Espa?a en su gira europea
Quiere grabar en espa?ol You (T¨²), un tema de su ¨²ltimo disco, Longing in their Hearts, para incluirlo en su gira por Espa?a, prevista para enero de 1995. Mientras tanto, Bonnie Raitt, ganadora de siete Grammys en los ¨²ltimos cuatro a?os, recorre los escenarios europeos y norteamericanos, adem¨¢s de apoyar moral y econ¨®micamente diversas cau¨¢s pol¨ªticas y sociales.
"El esfuerzo de grabaci¨®n satisface y recompensa, pero nunca produce el subid¨®n de una actuaci¨®n. Emociona cantar frente a una audiencia. De todas formas, me divierte tomar decisiones en el estudio. Grabar un disco es como pintar un cuadro. Mi voz en Longing in the hearts se grab¨® de una toma. Nunca repito las canciones m¨¢s de dos veces", explica Bonnie Raitt, una de las voces indiscutibles del blues norteamericano.La colecci¨®n de grammys cosechados recientemente cuatro en 1990 por Nick of the Time y por In the Mood, su d¨²o con John Lee Hooker; tres por su disco de 1991, Luck of the draw- apenas ha modificado el estilo de vida de Riatt.
"Me visto como antes y no gasto en joyas u otras tonter¨ªas semejantes. Pero, desde entonces, recaudo mucho m¨¢s dinero para mis grupos pol¨ªticos. Si hablo en favor de los artistas del rhythm & blues, reclamo el respeto de la mujer o defiendo el derecho a abortar, la prensa recoge mis palabras. Siempre he sido activa pol¨ªticamente, pero ahora tengo m¨¢s poder".
Su oficina es la sede de la Fundaci¨®n Rhythm & Bles, creada por Raitt y otros compa?eros hace cinco a?os, que distribuye 100.000 d¨®lares anualmente en asistencia m¨¦dica y financiera. "Gran parte del dinero se gasta en funerales", dice. Y contin¨²a: "Los m¨²sicos de blues, country, jazz y r&b no cobran derechos de autor por sus temas grabados antes de 1970. Es un crimen".
El reconocimiento mundial, 20 a?os despu¨¦s, de su primera grabaci¨®n, le permiti¨® incrementar las arcas de su fundaci¨®n en un mill¨®n de d¨®lares e intensificar su campa?a. "Tan s¨®lo tres casas discogr¨¢ficas pagan cuotas actuales al reeditar viejos temas. Debemos informar al p¨²blico de las compa?¨ªas, como Sony, que timan a sus artistas. Debemos pedir a la gente que no compre sus productos", insiste.
Californiana, de 44 a?os, Raitt lleva grabados once discos que incluyen versiones de sus amigos cantautores: John Hiatt, Richard Thompson y Paul Brady, entre otros. Temas originales dominan, sin embargo, en el repertorio de sus ¨²ltimas entregas. "Ultimamente me reconozco como cantautora. Soy guitarrista y cantante por mis propios, m¨¦ritos. Pero tambi¨¦n valgo para los arreglos musicales y para escoger art¨ªsticamente grupos de canciones. Me encanta retomar temas oscuros y arreglarlos de forma que se entiendan mejor. Cumplo una especie de misi¨®n filtrando a trav¨¦s de mi voz la m¨²sica de gente que quiero.
Quiz¨¢s el p¨²blico entender¨¢ mejor los blues" se?ala.
A Raitt no le preocupa tomar temas prestados tanto como interpretar "canciones excelentes". "Me he visto forzada a escribir porque no encontr¨¦ letras personales. Necesitaba decir cosas especif¨ªcas, afirma. Esta necesidad por expresar sentimientos ¨ªntimos se aprecia en su nuevo ¨¢lbum, que Raitt describe como "la b¨²squeda de una conexi¨®n m¨¢s profunda". En Circle Dance, Raitt habla de su padre, y en Cool Clear Water o Feeling of Falling, entre otros temas de Longing in their Hearts, sobre la frustaci¨®n de no poder "enloquecer" tanto como acostumbraba a?os atr¨¢s.
"La vida es dolorosa. Es penoso tener que ser responsable y mantenerse alerta todo el tiempo. Era m¨¢s divertido ser inconsciente", cuenta, haciendo un balance de sus ¨²ltimos veinte a?os. Era un alivio poder bloquear mi mente con sustancias qu¨ªmicas", dice en alusi¨®n al alcohol y las drogas de las que se alej¨® hace siete a?os, convencida de que la vida de rock and roll le estaba pasando la factura.
Babelia
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