El gabinete doctor Naval¨®n
En el anexo n¨²mero 84/9 del informe de la inspecci¨®n del Banco de Espa?a sobre Banesto, de 31 de enero de 1994 -dedicado al an¨¢lisis de cada uno de los pr¨¦stamos del banco bajo la administraci¨®n de Mario Conde-, exactamente en la l¨ªnea 21, hay una empresa que ha recibido 160 millones de pesetas: Euroib¨¦rica Internacional de Estudios. Seg¨²n el an¨¢lisis de los inspectores, Banesto tuvo que constituir, por las dificultades del cr¨¦dito a la citada compa?¨ªa, una provisi¨®n por la totalidad, es decir, los 160 millones de pesetas. La financiaci¨®n crediticia de Banesto a Euroib¨¦rica Internacional de Estudios y otras empresas de Antonio Naval¨®n, experto en imagen, asciende a unos 600 millones de pesetas. Las participaciones m¨¢s significativas de Euroib¨¦rica se extienden a firmas como Imagen y Mensaje, Hispano Lusa de Publicaciones, ALM Consultor¨ªa y Gesti¨®n, Diario de ?vila, Soriana de Ediciones y Azoe. Tambi¨¦n posee relaciones con el Institutode Prospectiva Social.Al menos una parte de los cr¨¦ditos, seg¨²n ha confirmado este cronista, fueron instrumentalizados por un director general adjunto de la entidad, Ram¨®n Bustamante, que sigui¨® "¨®rdenes de la superioridad". Bustamante se ocup¨® durante alg¨²n tiempo de "operaciones especiales" de Banesto.
Antonio Naval¨®n, ex periodista y especialista en relaciones p¨²blicas y pol¨ªticas, asesor¨® en 1990 al entonces presidente de Banesto en la gesti¨®n de las exenciones fiscales que Banesto solicitaba al Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda para constituir la Corporaci¨®n Industrial. Este cronista pudo saber a trav¨¦s de Jos¨¦ Antonio Segurado, asesor de Conde, que el banquero habl¨® ampliamente sobre las exenciones con el entonces secretario de Organizaci¨®n del partido socialista, Txiqui Benegas, quien a su vez se interes¨® por el asunto ante Solchaga.Poco despu¨¦s de la intervenci¨®n de Banesto, Naval¨®n se puso en contacto con un hombre del Banco Bilbao Vizcaya, el consejero director general ?ngel Corc¨®stegui, con quien tiene buenas relaciones. Quer¨ªa mantener una negociaci¨®n con los administradores provisionales de Banesto capitaneados por Alfredo S¨¢enz. El mensaje: una parte de los cr¨¦ditos era el pago de servicios prestados. Otra parte se pod¨ªa devolver. Naval¨®n se ofrec¨ªa, pues, a renegociar.
Mario Conde present¨® en persona ante Felipe Gonz¨¢lez el proyecto de la Corporaci¨®n Industrial, tras varias conversaciones con Benegas. Negoci¨® mano a mano con Solchaga y, finalmente, obtuvo s¨®lo una parte de lo que deseaba: frente a una propuesta de ahorro fiscal de 44.767 millones, se le concedieron 19.229 millones. Las plusval¨ªas netas resultaron ser de 60.000 millones contra los 100.000 millones que Banesto esperaba.
Hasta ahora, Ricardo G¨®mez; Acebo, ex vicepresidente primero de Banesto, y Rafael P¨¦rez Escolar, ex consejero, sosten¨ªan que el banco, a diferencia del resto de los miembros del sistema, no estaba involucrado en la trama de FiIesa. Sin embargo, precisamente cuando la justicia espa?ola est¨¢ sentando una nueva doctrina en materia de prevaricaci¨®n -casos de la construcci¨®n de Burgos y Juan Guerra, donde el que comete el delito es una persona privada como inductor-, el ex presidente de Banesto se?ala que su banco pag¨® 600 millones de pesetas para obtener las exenciones fiscales. Estos pagos, seg¨²n parece, est¨¢n registrados como cr¨¦ditos, lo que supondr¨ªa, de confirmarse, un delito de falsedad en documento mercantil. Si son pagos pol¨ªticos, ?por qu¨¦ aparecen como cr¨¦ditos? Los accionistas del banco ten¨ªan derecho a conocer la verdad que Conde y sus colaboradores le ocultaron en su d¨ªa y que ahora intentan justificar present¨¢ndose como v¨ªctimas del imaginario sistema.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.