Mal comienzo en Tokio

?nicamente un sistema de partidos pol¨ªticos inmerso en una muerte ag¨®nica como ¨¦sta podr¨ªa originar un Gobierno como el elegido por el Parlamento ja pon¨¦s el pasado mi¨¦rcoles. En un desesperado pacto que podr¨ªa convertirse en una especie de lento y mutuo suicidio, los dos tradicionales mayores partidos, el Partido Liberal Democr¨¢tico y el Partido Socialista, unieron sus fuerzas para elegir a Tomiichi Murayama como el primer primer ministro socialista desde los a?os cuarenta. Murayama representa el ala izquierda de un partido izquierdista; sin embargo, ahora depender¨¢ del ala derechista del principal partido conservador japon¨¦s, el enga?osamente llamado Partido Liberal Democr¨¢tico. Es una receta para la par¨¢lisis de la pol¨ªtica exterior e interior y un serio golpe a las esperanzas de la Administraci¨®n de Clinton de cooperaci¨®n comercial y con Corea.( ... ) La nueva alianza refleja los tres fracasos de la presente legislatura japonesa, la primera desde 1955 no dominada por el Partido Liberal Democr¨¢tico.( ... ) Por ahora, los pol¨ªticos del viejo estilo m¨¢s amenazados por el cataclismo de los pasados a?os est¨¢n disfrutando de una dulce venganza. A menos que el Partido Socialista el Partido Liberal Democr¨¢tico comiencen a responder a un electorado que est¨¢ harto de la corrupci¨®n, una estancada econom¨ªa y altos precios, el futuro de estos veteranos faltos de inspiraci¨®n parece cualquier cosa menos claro.

1 de julio.