Los 'marines' preparan en Bahamas la invasi¨®n de Hait¨ª

Los 2.800 marines a bordo de la flotilla norteamericana que navega por aguas del Caribe realizaron en los ¨²ltimos d¨ªas en Bahamas ejercicios de rescate de extranjeros en Hait¨ª, seg¨²n inform¨® ayer el diario The Washington Post y confirmaron fuentes del Pent¨¢gono, aunque el Gobierno de Estados Unidos insisti¨® en que una invasi¨®n no es todav¨ªa inminente. Fuentes de la Administraci¨®n reconocieron que las maniobras pretenden aumentar la presi¨®n sobre el hombre fuerte haitiano, Raoul C¨¦dras, para que acepte finalmente retirarse del poder.

En varias entrevistas con medios norteamericanos, el general C¨¦dras ha sostenido, sin embargo, que estar¨¢ en su puesto de jefe del Ej¨¦rcito hasta que el plazo de su mandato expire en enero del a?o pr¨®ximo "cualesquiera que sean las consecuencias".Las maniobras efectuadas en Bahamas por uno de los contingentes que intervendr¨ªan en una eventual invasi¨®n de Hait¨ª est¨¢n justificadas, seg¨²n el Gobierno norteamericano, por el agravamiento del clima de violencia en ese Pa¨ªs, que supone una amenaza para la colonia estadounidense. ?sta consta todav¨ªa de unas 3.500 personas.

A lo largo de este mes, pr¨¢cticamente a diario han aparecido en las calles de Puerto Pr¨ªncipe cad¨¢veres de opositores al r¨¦gimen militar maniatados y con un disparo en la cabeza. Se teme que la salida de los observadores de Naciones Unidas y de la OEA (Organizaci¨®n de Estados Americanos), que abandonaron ayer el pa¨ªs expulsados por el Gobierno de Puerto Pr¨ªncipe, agrave todav¨ªa m¨¢s la situaci¨®n.

La amenaza contra los ciudadanos norteamericanos ser¨ªa, seg¨²n manifest¨® el senador Sam Nunn, presidente del Comit¨¦ de Fuerzas Armadas del Senado, la ¨²nica justificaci¨®n razonable para invadir Hait¨ª. Nunn no es partidario de una invasi¨®n con el objetivo exclusivo de restaurar la democracia. Al mismo tiempo, el influyente senador ha manifestado la necesidad de comprometer al presidente haitiano en el exilio, Jean-Bertrand Aristide, en el proceso de decisi¨®n de una intervenci¨®n militar. Aristide se ha apoyado hasta ahora en la Constituci¨®n haitiana para negarse a respaldar abiertamente una invasi¨®n. Sin embargo, ayer pidi¨® a la comunidad internacional una "acci¨®n r¨¢pida y definitiva" para echar a los militares golpistas del poder.

La Casa Blanca ha reconocido que no cuenta, por ahora, con el visto bueno de los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina para ir adelante con los planes de invasi¨®n. El secretario de Estado, Warren Christopher, se limit¨® a afirmar en el Congreso que si la intervenci¨®n militar se ejecuta en ¨¦sta participar¨ªan ¨²nicamente tropas de Estados Unidos.

La portavoz de la Casa Blanca, Dee Dee Myers, anunci¨® que entre ocho y 12 pa¨ªses participar¨¢n en una fuerza de paz que se desplegar¨¢ en la isla despu¨¦s de una eventual intervenci¨®n militar. Myers no precis¨® de que pa¨ªses se trata.

Sobre el momento de la intervenci¨®n, el asesor especial del presidente para asuntos haitianos, William Gray, insisti¨® ayer que ¨¦sta no es todav¨ªa inminente. "Yo dir¨ªa que no es inminente si la inminencia se mide en t¨¦rminos de hoy, ma?ana, horas o d¨ªas", declar¨® Gray.