El perro del hortelano
Debo admitir que no he seguido con mucho detenimiento las disquisiciones que han llevado a nuestra Comunidad -?o es nuestro Ayuntamiento?- a tomar la sabia decisi¨®n de ordenar el cierre de los hipermercados los d¨ªas festivos. Me imagino que ha sido por instigaci¨®n del peque?o comercio y en su, defensa, pero no acabo de ver la l¨®gica pues ellos tampoco abren.Entonces nos encontramos con la absurda situaci¨®n de que no podemos abastecernos de nada, a no ser, eso s¨ª, que cojamos el coche para desplazarnos a un pueblo de la provincia.
Esta es, a todas luces, una decisi¨®n retr¨®grada que lo ¨²nico que consigue es jorobar al ciudadano de a pie, en un intento de proteger a esas peque?as tiendas -lo que los americanos llaman el pop and mom store- frente a las grandes superficies, en una guerra que tienen perdida, como ha ocurrido y est¨¢ ocurriendo en todos los pa¨ªses civilizados.
Dejemos de jugar al avestruz: que cada cual establezca su oferta y su horario y que triunfe el que tenga mayor aceptaci¨®n por parte del usuario-
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