Dispuesto a "salir corriendo"

Jos¨¦ Mar¨ªa Ripoll tiene 63 a?os y es muy dif¨ªcil que pierda la sonrisa incluso cuando habla de su enfermedad. Tiene una cirrosis hep¨¢tica y necesita un h¨ªgado que supla al suyo que, seg¨²n dice, "funciona s¨®lo al 30%". Desde hace dos meses est¨¢ en la lista de espera de la Organizaci¨®n Nacional de Trasplantes (ONT) y lleva la espera con pasmosa tranquilidad. "Tengo algunas crisis, pero son las menos. Reparto mi tiempo entre la lectura y la televisi¨®n; salvo despu¨¦s de comer, que me voy al bar de enfrente de casa a jugar unas partiditas de domin¨® con los amigos. No me alejo nunca de casa, por si tengo que salir corriendo al hospital".Lo de "salir corriendo" es literal. "Los pacientes en lista de espera contamos con un salvoconducto para abrirnos paso, por ejemplo, en un atasco. Si me avisasen mientras estoy en un pueblo de la sierra, la Guardia Civil me facilitar¨ªa el camino hacia Madrid", cuenta divertido Ripoll. Lo de avisar no ser¨ªa ning¨²n problema, ya que su coordinador de trasplantes tiene, adem¨¢s de su tel¨¦fono y el d¨¦ sus tres hijos, el del bar donde Jos¨¦ Mar¨ªa juega al domin¨®.

Ya sabe lo que es acudir a toda prisa a un hospital, aunque fue all¨ª como segundo receptor. Ir de segundo receptor a un trasplante es como ser suplente en el f¨²tbol. "Estuve por si algo fallaba a ¨²ltima hora", relata Ripoll. "Estaba todo preparado, s¨®lo faltaba que me anestesiasen". Esta t¨¦cnica se emplea por si hay alg¨²n problema con el primer receptor. Si algo falla (que el. paciente rechace el ¨®rgano, por ejemplo) ese h¨ªgado o coraz¨®n no puede desperdiciarse, por lo que siempre hay otro paciente que pueda recibirlo.

Ripoll afirma que cuando estuvo ingresado nunca lleg¨® a ponerse nervioso. "Yo estaba muy traquilo, mi mujer, Cristina, estaba mucho peor que yo". Jos¨¦ Mar¨ªa insiste en el fundamental apoyo de su familia, que incluso ha reducido sus vacaciones para estar con ¨¦l. "Les he trastocado un poco todo", se lamenta.

El caso de Jos¨¦ Mar¨ªa ilustra la privilegiada situaci¨®n de Espa?a en un tema tan importante como el de los trasplantes que ha cosechado incluso la felicitaci¨®n del Consejo de Europa. Ripoll tiene sus propios argumentos para certificar este ¨¦xito. "Todos cuantos me han atendido son j¨®venes y maravillosos; yo me limito a hacer exactamente lo que me dicen", contaba ayer con cara de escolar que habla de su maestra favorita.