Uno de los espa?oles detenidos en M¨²nich con plutonio negoci¨® en Ucrania la compra de material radiactivo
El espa?ol Julio Oroz, una de las tres personas detenidas en M¨²nich este mes acusadas de contrabando de plutonio 239, realiz¨® un trato con un militar retirado de Kiev para comprar material radiactivo en Ucrania, seg¨²n manifest¨® una fuente que trabaj¨® en Mosc¨² con el encausado. De verificarse esta informaci¨®n, las sospechas sobre los fallos en el sistema de seguridad de los materiales radiactivos en el espacio postsovi¨¦tico se dirigir¨ªan hacia Ucrania.
Ucrania no produce plutonio militar (apto para fabricar armas at¨®micas), una sustancia que en el espacio territorial de la antigua URSS se obtiene s¨®lo en tres reactores especiales situados en territorio ruso.El estamento militar ucranio, que sufre de problemas econ¨®micos en mayor medida que el Ej¨¦rcito ruso, se ve afectado por un elevado nivel de corrupci¨®n que, te¨®ricamente, podr¨ªa hacer posible la participaci¨®n de medios militares en una operaci¨®n de contrabando, seg¨²n se?alaron medios bien informados en Kiev.
El presidente de Ucrania, Leonid Kuchma, elegido el pasado julio, ha iniciado una campa?a contra la corrupci¨®n que previsiblemente afectar¨¢ tambi¨¦n al Ej¨¦rcito, se?alaron las fuentes.
La fuente relacionada con Oroz, que no quiere ver publicada su identidad, manifest¨® que el empresario espa?ol hab¨ªa establecido contacto con su presunto proveedor desde Mosc¨² a principios de julio Este contacto se realiz¨® en un clima de alto secreto, a diferencia de otras citas de negocios del empresario, espa?ol que ten¨ªan que ver con la la compraventa de cemento, frutos secos o materias primas, se?al¨® la fuente.
Seg¨²n ¨¦sta, Oroz habr¨ªa sido especialmente parco en detalles sobre el negocio que ten¨ªa en perspectiva cuando concert¨® su cita con el militar de Kiev, pero se habr¨ªa jactado de sus buenas relaciones en Ucrania que, siempre seg¨²n los medios consultados, le habr¨ªan permitido acceso a zonas militares habitualmente prohibidas a las personas ajenas.
Tras su llegada al poder, Kuchma, que en el pasado dirigi¨® la empresa Iuzhmazh, de Dnepropetrovsk, la mayor f¨¢brica de misiles del mundo, ha incrementado las medidas de seguridad sobre las instalaciones militares y ha prohibido la visita de personas ajenas a los silos donde se encuentran los misiles nucleares.
Seg¨²n las fuentes consultadas, Oroz habr¨ªa desde?ado tambi¨¦n los consejos de medios cubanos residentes en Mosc¨², que le llamaron la atenci¨®n sobre el peligro que implicaban las actividades que se dispon¨ªa a emprender. La fuente opin¨® que los negocios de Oroz parec¨ªan "normales" hasta que se efectu¨® la cita relacionada con el material radiactivo que, seg¨²n el empresario, iba a enriquecerle r¨¢pidamente.
Medios informados en Kiev se?alan que los servicios de inteligencia de varios Estados de Oriente Pr¨®ximo se muestran particularmente activos en Ucrania e indican que existen sospechas de que la regi¨®n carbon¨ªfera de Donb¨¢s y la pen¨ªnsula de Crimea han podido ser utilizadas como bases para actividades de contrabando de narc¨®ticos procedentes de Asia y armas que, tras un tortuoso camino, llegan a la ex Yugoslavia.
El empresario navarro Julio Oroz operaba en Rusia y en Ucrania desde hac¨ªa varios a?os y al parecer tuvo problemas econ¨®micos que se fueron agravando progresivamente. Al ser detenido, dej¨® tras s¨ª numerosas deudas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.