Estados Unidos considera imposible alcanzar acuerdos con el Vaticano en El Cairo
El protagonismo dado al aborto impide debatir asuntos cruciales como la educaci¨®n
El enfrentamiento estaba ayer servido en la Conferencia sobre Poblaci¨®n y Desarrollo de El Cairo. "Se ilusionan in¨²tilmente quienes piensan que se pueda llegar a acuerdos tales que hagan posible la firma del Vaticano", dijo el vicepresidente norteamericano, Al Gore, tras un encuentro privado de cuarenta minutos con la delegaci¨®n de la Santa Sede sobre el Programa de Acci¨®n que la ONU propone para frenar el crecimiento demogr¨¢fico en el cambio de milenios. Mientras, en el comit¨¦ que discute a puerta cerrada el texto, el pol¨¦mico tema del aborto volv¨ªa a ser el protagonista de la jornada.Las declaraciones de Al Gore no fueron un buen augurio. "El Vaticano nunca firm¨® un documento de las cumbres de poblaci¨®n anteriores; ?por qu¨¦ va a hacerlo ahora?", comentaba, contrariado y esc¨¦ptico, Al Gore. El Vaticano contraatac¨®. Su portavoz, Joaqu¨ªn Navarro Valls, difundi¨® un comunicado de tres p¨¢ginas en el que el Vaticano insiste en que una pol¨ªtica de poblaci¨®n "no es un asunto de cifras, sino de personas" y deja claro que no quiere ni o¨ªr hablar del aborto y que no acepta los m¨¦todos anticonceptivos no naturales, condones incluidos, ni ese lenguaje de "salud sexual y reproductiva".
El jefe de la delegaci¨®n holandesa, Nikola Biegman, que presidi¨® la sesi¨®n de ayer, explic¨®: "Hemos dado prioridad al aborto para acabar de una vez con los malentendidos y evitar que un punto para nosotros menor provoque una ruptura que arrastre otras cuestiones mucho m¨¢s importantes".
Batalla sem¨¢ntica
La batalla en la conferencia de El Cairo utiliza los recovecos de una complicada sem¨¢ntica. La sesi¨®n de ayer se centr¨® casi exclusivamente en el p¨¢rrafo 8.25, en el que se insta a todos los Gobiernos y a las organizaciones intergubernamentales y no gubernamentales a ocuparse de manera franca y directa del aborto en malas condiciones como un importante problema de salud p¨²blica. Para la ONU y los partidarios del documento, la referencia va dirigida a los estragos provocados por abortos realizados en condiciones no apropiadas y a pedir asistencia para aquellas mujeres que arriesgan su vida. Para el Vaticano y ciertos sectores musulmanes integristas, ello supone una sibilina f¨®rmula para facilitar la legalizaci¨®n del aborto.
"Hay tantas sensibilidades, tan distintas, que los malentendidos se han convertido en uno de nuestros principales problemas", dijo Biegman al poner como ejemplo de ellos la referencia a la diversidad de familias. "Hasta este tipo de referencias ha sido interpretado err¨®neamente; especialmente por pa¨ªses musulmanes que han visto en ello una aprobaci¨®n de las parejas homosexuales cuando, para nada, la homosexualidad forma parte de los asuntos de esta conferencia".
La batalla sem¨¢ntica se libra para intentar eliminar los numerosos corchetes que salpican el documento indicando los temas sobre los que no se logr¨® un consenso definitivo en las reuniones preparatorias de Nueva York. Ayer, buena parte de los debates se centraron en la oferta realizada por el Vaticano de eliminar los corchetes que contienen el t¨¦rmino "control de la fertilidad" y sustituirlo por el de "planificaci¨®n familiar". La diferencia de matices, dicen los portavoces del Vaticano, estriba en que control de la fertilidad "conduce a una serie de enlaces telesc¨®picos que llevan de una cosa a otra hasta llegar al aborto".
En esta disputa, los pa¨ªses del ?frica occidental franc¨®fona, encabezados por el Estado de Benin, se apuntaron a aceptar el punto tal como est¨¢ escrito. Entre los que presentaron reservas en el lado musulm¨¢n figuran Egipto, Pakist¨¢n e Indonesia. El presidente de la sesi¨®n se mostr¨® comprensivo con ellos: "Los Gobiernos musulmanes necesitan concesiones que, sin edulcorar el documento, les sirvan como argumento para acallar a los integristas".
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