"Quiero una Europa del ciudadano con una Constituci¨®n federal"
Gil Carlos Rodr¨ªguez Iglesias, asturiano, 48 a?os, flamante presidente del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas (TJCE). Catedr¨¢tico de Derecho Internacional. De formaci¨®n germ¨¢nica y sencillez asturiana. Propugna una Constituci¨®n europea Pe matriz federal. Y una Europa cercana al ciudadano.Pregunta. ?C¨®mo resume los 42 a?os de herencia?
Respuesta. Gracias a la existencia del tribunal, las normas para construir la Uni¨®n Europea se han llevado a cabo. Las libertades han sido ampliadas. El tribunal contribuye a que la UE funcione y avance.
P. ?Insin¨²a que la jurisprudencia ha desbordado la letra de los tratados?
P. Ha servido para que se cumpla la letra, y en algunos casos para que se alcancen los objetivos sin limitarlos por algunos aspectos de la letra. Ha impulsado la libre circulaci¨®n de mercanc¨ªas y personas. Un ejemplo: al interpretar el reglamento armonizador de la Seguridad Social, se ha beneficiado a los trabajadores, eliminando muchos obst¨¢culos nacidos de la variedad legislativa.
P. Los asuntos se acumulan. Una sentencia tarda dos a?os.
P. No m¨¢s que en otros tribunales, y adem¨¢s tenemos el problema de la traducci¨®n a todas las lenguas. Nos preocupa la duraci¨®n de los procesos, pero hay que respetar las garant¨ªas, los plazos. Y el n¨²mero de asuntos crece.
P. La ampliaci¨®n aumentar¨¢ el trabajo, pero tambi¨¦n el n¨²mero de jueces. ?Qu¨¦ aportar¨¢n?
P. Todos los pa¨ªses que se integran enriquecen el conjunto con su propia cultura jur¨ªdica. Eso fue muy notable con la adhesi¨®n del Reino Unido. Pero m¨¢s jueces no significa mayor productividad. Quiz¨¢ se pueda crear alguna sala nueva, y as¨ª dictar m¨¢s sentencias. Aunque el tribunal tiene como funci¨®n esencial uniformar el derecho comunitario, desarrollar una l¨ªnea coherente de interpretaci¨®n. Por eso suele actuar en pleno. El aumento de salas puede poner en peligro esa coherencia.
P. ?C¨®mo ve el horizonte 1996 de la UE?
P. Con gran incertidumbre. El Tratado de la Uni¨®n ampli¨® las ambiciones pol¨ªticas comunitarias. Pero en su ratificaci¨®n despert¨® nuevas actitudes hostiles al proceso de integraci¨®n. Y las concepciones pol¨ªticas difieren, entre federalistas y librecambistas m¨¢s aferrados a la soberan¨ªa nacional; se discute sobre las dos velocidades... El 96 deber¨ªa aclarar y decantar todo eso.
P. ?Hacia d¨®nde?
P. Hablo como ciudadano. Estoy a favor del desarrollo federalista que inspir¨® el nacimiento de la Comunidad. Eso s¨ª, el proceso necesita una readaptaci¨®n a" la nueva Europa, muy distinta a la de la posguerra. Ahora, con las nuevas ambiciones, el m¨¦todo intergubernamental queda limitado y hay que completarlo.
P. Mediante una Constituci¨®n, por ejemplo.
P. S¨ª. Deseo una Constituci¨®n que sea producto de un proceso constituyente y no de un acuerdo intergubernamental. Una Constituci¨®n federal y respetuosa con las diversas tradiciones nacionales, que no han agotado todo su significado hist¨®rico y pol¨ªtico.
P. ?Cu¨¢l es el papel del tribunal para esa nueva etapa?
P. Garantizar el respeto del derecho comunitario. Si la UE llega a convertirse en una aut¨¦ntica federaci¨®n, sobre un modelo original -no creo en un Estado federal como el de EE UU, tenemos m¨¢s diversidades nacionales-, habr¨¢ que organizar una justicia federal, muy descentralizada.
P. El Tribunal Supremo en EE UU tambi¨¦n ejerce de Constitucional.
P. Ya hoy la pr¨¢ctica ha reforzado el car¨¢cter constitucional del TJCE. Cada d¨ªa resolvemos m¨¢s problemas de delimitaci¨®n de competencias entre Estados miembros e instituciones comunitarias, y entre ¨¦stas.
. P. El tribunal ha reforzado al ciudadano frente a su Estado. ?Hasta d¨®nde puede llegar?
P. No es una l¨ªnea reciente, sino desde siempre. Algunos conceb¨ªan que los tratados afectaban a los Estados y s¨®lo indirectamente a los ciudadanos. El tribunal los ha interpretado como creadores de un sistema jur¨ªdico directamente ¨²til para los individuos. Es dif¨ªcil, pero es posible reforzar su posici¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Gil Carlos Rodr¨ªguez Iglesias
- Adjudicaci¨®n contratos
- Declaraciones prensa
- Tribunal Justicia Uni¨®n Europea
- Federalismo
- Contratos administrativos
- Uni¨®n pol¨ªtica europea
- Derecho administrativo
- Tribunales
- Sentencias
- Uni¨®n Europea
- Organizaciones internacionales
- Sanciones
- Gente
- Poder judicial
- Ideolog¨ªas
- Espa?a
- Juicios
- Relaciones exteriores
- Pol¨ªtica
- Administraci¨®n p¨²blica
- Proceso judicial
- Sociedad
- Justicia