Vivir con un coraz¨®n mec¨¢nico permanente

Arthur Cornhill, un brit¨¢nico de 62 a?os, se ha convertido en el primer portador de un coraz¨®n mec¨¢nico permanente para llevar una vida normal. El aparato, fabricado en pl¨¢stico y metal, sustituye las funciones de bombeo del ventr¨ªculo izquierdo, conservando el propio ¨®rgano del paciente. Una bater¨ªa externa acoplada a la cintura se ocupa de mantenerlo en marcha. Con la operaci¨®n, efectuada en el hospital Papworth (Cambridge), comienza una prueba cl¨ªnica destinada a evaluar la eficacia de un sistema pensado para aliviar la escasez de donaciones para trasplantes."Es maravilloso volver a caminar de forma aut¨®noma", exclam¨® feliz Arthur Cornhill el pasado 12 de octubre, instantes despu¨¦s de recibir el alta m¨¦dica. Casado y con una hija, padec¨ªa una cardiomiopat¨ªa (debilitamiento del m¨²sculo cardiaco) en fase terminal. Durante una operaci¨®n de cuatro horas, efectuada en agosto de este a?o, le fue implantado en el abdomen un dispositivo el¨¦ctrico bautizado como Aparato de Ayuda al Ventr¨ªculo Izquierdo. Conectado a su propio coraz¨®n, el mismo cuenta con un tubo de entrada y otro de salida. El primero lleva la sangre del ventr¨ªculo izquierdo hacia el aparato el¨¦ctrico. El segundo tubo se encarga de recibirla y conducirla hasta la aorta. El ejercicio est¨¢ sincronizado con el latido natural del coraz¨®n, que evita as¨ª el cansancio derivado del bombeo de sangre.

La bater¨ªa que hace posible su funcionamiento es portada por el paciente en la cintura como si se tratara de un peque?o transistor. El recambio de las pilas puede hacerse en casa. Hasta la fecha, estas operaciones serv¨ªan para que los enfermos se mantuvieran con vida en espera de un trasplante. M¨¢s de 200 personas han llevado el dispositivo durante periodos que oscilan entre ocho d¨ªas y un a?o. En el caso de Cornhill, sin embargo, debe asistir a su coraz¨®n enfermo de forma definitiva.

Con esta operaci¨®n ha dado comienzo una prueba que incluye a ocho pacientes. Cuatro de ellos recibir¨¢n el coraz¨®n mec¨¢nico. El resto seguir¨¢ tomando su medicaci¨®n habitual. Sus progresos ser¨¢n evaluados y comparados a lo largo de dos a?os por el mismo equipo del hospital Papworth que ha operado a Cornhill. Si el dispositivo da buenos resultados, puede convertirse en una alternativa fiable y econ¨®mica a los actuales trasplantes.