Se reabre el 'caso GAL'
EL JUEZ Baltasar Garz¨®n ha decidido, atendiendo a la petici¨®n del fiscal, reabrir el sumario sobre un atentado de los GAL realizado en 1985 en el bar Monbar de Bayona y en el que cuatro personas fueron asesinadas. Aunque se trata de un asunto ya juzgado en Francia, la reapertura se justifica por el objetivo de averiguar si los ex polic¨ªas Amedo y Dom¨ªnguez, u otras personas, tuvieron alguna vinculaci¨®n con el mismo, bien directamente, bien mediante su financiaci¨®n. El sumario abierto en Espa?a hab¨ªa sido provisionalmente sobrese¨ªdo en 1992. Otro sumario relacionado con los GAL, el del secuestro de Segundo Marey -primera actuaci¨®n criminal reivindicada bajo esas siglas-, fue tambi¨¦n reactivado por Garz¨®n tras haber quedado semiparalizado hace a?os.El caso Amedo no cerr¨® el cap¨ªtulo de los GAL. Las principales inc¨®gnitas dejadas tras de s¨ª por ese grupo terrorista quedaron sin desvelar en el proceso que conden¨® a 108 a?os de prisi¨®n a Amedo y Dom¨ªnguez, por mas que la sentencia, y la propia celebraci¨®n del juicio, constituyera un importante triunfo de la justicia sobre la pretensi¨®n de impunidad. Las actividades de los GAL (una organizaci¨®n con 23 asesinatos a sus espaldas entre los a?os 1983 y 1986) quedaron difuminadas en la sentencia. La Justicia s¨®lo pudo demostrar la existencia de un grupo ilegal desconocido -queda en el misterio si se trata o no de la banda que respond¨ªa a las siglas de los GAL- con el que los ex polic¨ªas se relacionaron oficialmente, si bien extralimit¨¢ndose en sus funciones.
Sin embargo, el caso Rold¨¢n ha aportado algunos indicios sobre la. posible existencia en Suiza de fondos y cuentas corrientes, que pudieron servir en su momento para financiar actividades de los GAL. Ello ha abierto una nueva v¨ªa de investigaci¨®n. De hecho, fue la barrera del secreto que ampara los fondos reservados la que impidi¨® en su d¨ªa a Garz¨®n culminar la investigaci¨®n sobre estos dos casos.
La reactivaci¨®n del sumario de Segundo Marey no plantea duda alguna de car¨¢cter procesal. En ning¨²n momento han dejado de realizarse diligencias con vistas al esclarecimiento del caso. Incluso en el periodo en que el juez Garz¨®n estuvo dedicado a la pol¨ªtica, su sustituto ha seguido indagando entre guardias civiles y polic¨ªas relacionados profesionalmente con Amedo. Pero tampoco debe plantear ninguna duda la reactivaci¨®n del sumario relativo al atentado del bar Monbar, a pesar de que la justicia francesa condenara a los autores materiales. Y ello porque desde el primer momento la justicia espa?ola tuvo indicios que apuntaban a Amedo y Dom¨ªnguez, como inductores del atentado y abri¨® las correspondientes diligencias. De ah¨ª que los, hechos juzgados en Francia no sean los mismos que se intentan dilucidar en Espa?a.
Siempre que se analiza una decisi¨®n judicial suele criticarse su enorme desfase temporal respecto de los hechos que juzga o investiga. Esta cr¨ªtica no tiene raz¨®n de ser en lo que se refiere a los GAL. Salta a la vista que la lenta Marcha de la justicia en estos asuntos no les imputable a ninguno de sus reconocidos defectos o carencias. El obst¨¢culo que le impide avanzar m¨¢s deprisa radica en la misma materia que investiga.
Es arriesgado, pues, hacer procesos de intenciones respecto de artificiales. paralizaciones o reactivaciones judiciales en asuntos tan complicados. Si aparecen indicios que pueden aclarar tales asuntos, a la justicia no le queda otra opci¨®n que investigarlos. El ministro Belloch ha defendido la necesidad de "hacer un razonable ajuste de cuentas con el inmediato pasado" en lo referente a la corrupci¨®n pol¨ªtica. Con mayor motivo hay que hacerlo en relaci¨®n con graves delitos como los que tienen que ver con los GAL. Aqu¨ª no cabe transacci¨®n alguna. Nunca es tarde para aclarar los cr¨ªmenes de los GAL y para que sus autores en diverso grado respondan ante la justicia.
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