Ancianos en el 'cole'
He le¨ªdo con estupor durante es tos d¨ªas en la prensa la mala informaci¨®n que se ha estado difundiendo de la situaci¨®n en el colegio Casa de Paz de El Escorial.A m¨ª me gustar¨ªa que los medios de comunicaci¨®n contrastasen la noticia con las dos partes y no escriban, por llenar espacios, sin verdadero conocimiento de la noticia, ya que pone en entredicho la condici¨®n de ser humano de los padres de los alumnos de dicho colegio. De esta mala informaci¨®n hay una opini¨®n p¨²blica equivocada (v¨¦anse las cartas al director del d¨ªa 4 de noviembre de este peri¨®dico). Por todo esto, quiero contar brevemente y de la manera m¨¢s objetiva que me permite mi grado de implicaci¨®n.
1. El colegio Casa de Paz tiene una parte demasiado Vieja que no resulta apropiada para dar clases, por lo que se construy¨® una parte nueva donde se instalaron las aulas para los ni?os.
2. Los padres, al realizar la matr¨ªcula de sus hijos en el mes de mayo, lo, hicieron porque ¨¦stos iban a estar en la parte nueva, acondicionada perfectamente para la estancia de los ni?os; si no, a lo mejor no les hab¨ªan matriculado en este colegio.
3. Despu¨¦s de cambiar a los ni?os de la parte nueva a la vieja (con ventanas demasiado bajas y sin rejas, cables colgando, escaleras de salida al patio demasiados peligrosas), la direcci¨®n del colegio comunic¨® a los padres que era para pintar, nunca se les dijo que era para instalar a personas mayores en las aulas de sus hijos.
4. Estas personas mayores ven¨ªan a una residencia y se les instal¨® en este colegio, donde no tienen tampoco las condiciones m¨ªnimas y necesarias para una buena estancia. Son demasiadas escaleras sin ascensores, no hay ba?os -s¨®lo servicios- (no olvidemos que es un colegio y los residentes viven en la parte vieja del edificio).
5. Los padres nunca se quejaron por estar los ancianos, sino por el enga?o por parte de la direcci¨®n del colegio, que desplaz¨® a sus hijos a un edificio insalubre y poco seguro sin previo aviso.
6. Los padres no solamente est¨¢n para pagar la mensualidad, sino tambi¨¦n, entre otras cosas, para tomar parte en las decisiones que sobre sus hijos tome la direcci¨®n del centro.
Soy t¨ªa de una nena de tres a?os que va a ese colegio, y esta ni?a vive con su bisabuela y abuelos, por o que me duele mucho leer las cartas aparecidas en su peri¨®dico y todas las noticias, tanto en prensa como en televisi¨®n, sin pensar el da?o humano que han hecho, pero teniendo claro que la noticia, tal como se propag¨®, vende mucho.
No entiendo c¨®mo una noticia se puede tergiversar tanto, ni a qui¨¦n puede interesar que se tergiverse.-
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