?D¨®nde esta Paloma Chamorro?

Especiales nost¨¢lgicos de Juanito Valderrama, Mocedades o Ana Bel¨¦n y V¨ªctor Manuel, y artistas que por lo general no representan la actualidad de los m¨²ltiples sonidos de los noventa han sido los ¨²ltimos regalos de la televisi¨®n, a los aficionados al pop. Muy lejos queda la polifac¨¦tica Paloma Chamorro, que pasa ahora su edad de oro en Roma, preparando proyectos para TVE.Tele 5, adem¨¢s, de su Sabor a Lolas, apost¨® por las sorpresas de madrugada intempestiva y por la Quinta marcha, cuya f¨®rmula para la zona de. baile replic¨® TVE con Ponte las pilas. El hiphop y las macrodiscotecas de la ruta del bakalao tuvieron su traducci¨®n en los plat¨®s m¨¢s juveniles, como en su d¨ªa lo encontraron los Travoltas en Aplauso y La juventud baila.

Disc jockeys enrollados y gritones; chicos y chicas modernos, estereotipos a lo Sensaci¨®n de vivir, han poblado la galaxia pop televisiva.

Le?a al . *mono que es de goma y Planeta de movidas, en Antena 3, tuvieron una fugaz vida.

"Critic¨¢bamos el pei-nado de Chamorro, pero hoy lloramos por no encontrar un programa en directo similar a La edad de oro, preocupado no tanto por la comercialidad, sino por la actualidad y los gustos de la audiencia", suscriben los interesados.

Lola Barranco, responsable de contrataci¨®n musical de Tele 5, puntualiza sobre el escaso panorama: "a) la base promocional de un disco es la radio. La m¨²sica ya no es el ¨²nico ingrediente de un programa juvenil, que requiere algo muy visual. b) Antena 3, lo mismo que con su pol¨ªtica de estrellas, ofreci¨® a cantantes en promoci¨®n mucho dinero, encareciendo el producto en una ¨¦poca de crisis y precios locos. c) La promoci¨®n en televisi¨®n siempre fue gratis; no es que un artista no valga nada, sino que ahora un top nacional puede pedirte un cach¨¦ de cinco millones de pesetas por estrenar un disco que no sabemos si funcionar¨¢. d) La lista de ventas de AFYVE est¨¢ simbiotizada con la lista de TVE. e) Los derechos intelectuales, de emisi¨®n y producci¨®n de los videoclips que se cobran son salvajes".

"No siento nostalgia de mi programa; con lo r¨¢pido que van las comunicaciones, es una f¨®rmula ya superada. S¨®lo s¨¦ que la democracia incluye un derecho a las minor¨ªas que no existe", afirma Beatriz Pecker, ex directora de Rockopop.