Ampliaci¨®n hacia el Este a ritmo lento

La ampliaci¨®n de la Alianza Atl¨¢ntica hacia el Este se har¨¢ a ritmo pausado. Este asunto constitu¨ªa otro motivo de fricci¨®n entre norteamericanos y europeos: ?Qu¨¦ velocidad imprimir a la incorporaci¨®n de los pa¨ªses del Este europeo, hoy vinculados a trav¨¦s de la sala de espera de la Asociaci¨®n para la Paz (APP)? La APP creada hace un a?o, acoge ya a 23 pa¨ªses, dispone de una c¨¦lula de coordinaci¨®n y ha realizado este oto?o tres ejercicios militares conjuntos.

EE UU era partidario de la m¨¢xima celeridad: "Os urjo a que empecemos ahora", enfatiz¨® el secretario de Estado, Warren Cristopher, "nuestras deliberaciones internas" sobre el asunto. Los europeos propugnaban mayor prudencia para no irritar a los sovi¨¦ticos, suspicaces por el pase de sus antiguos aliados a la vieja organizaci¨®n enemiga.

Al final, con escasa discusi¨®n y en aras de evitar motivos de tensi¨®n adicional, se lleg¨® a un acuerdo: el a?o 1995 se dedicar¨¢ a realizar un "estudio detallado" para "determinar la forma de la ampliaci¨®n, los principios que deben regirla y las implicaciones del estatuto de miembro", seg¨²n el comunicado final. Un t¨¦rmino medio que ya hab¨ªa anticipado Christopher.

Dicho estudio "de las obligaciones de los socios y las implicaciones" de la apertura de la OTAN, como resumi¨® Javier Solana, se evaluar¨¢ en primavera y culminar¨¢ dentro de un a?o. Y para tranquilizar a los rusos se ofreci¨® al ministro K¨®zirev, en una reuni¨®n posterior un "di¨¢logo singular espec¨ªfico" que lo distinga de sus antiguos aliados. Pero K¨®zirev critic¨® la APP diciendo que puede convertirse en "un instrumento para tina ampliaci¨®n decidida de antemano por la OTAN", y aplaz¨® la firma de su documento espec¨ªfico.

Tambi¨¦n el Mediterr¨¢neo asom¨® la cabeza en Bruselas: "Estamos preparados a establecer contactos, caso por caso" entre la Alianza y los pa¨ªses; de la cuenca sur, indican las conclusiones. Algo que satisfizo a Solana.