Los padres de una deficiente recurren a un tribunal para esterilizar a su hija
Una juez rechaz¨® la solicitud por "razones de conciencia"
Ver¨®nica, una mujer de 20 a?os, padece el s¨ªndrome de Down. Sus padres, contrarios al aborto, intentaron facilitarle anticonceptivos, pero su organismo no los tolera. Por todo ello, han pedido autorizaci¨®n judicial para esterilizarla. Hace tres meses, una juez de Valencia apel¨® a "razones de conciencia" para rechazar la solicitud. Los padres reeditaron ayer su reclamaci¨®n ante la Audiencia de Valencia y contaron con el apoyo del fiscal.
La juez Beatriz Sobremonte considera a Ver¨®nica "una ni?a". Espera, por ello, que sus padres. "la cuiden y protejan". La magistrada recuerda en su sentencia de hace tres meses los informes psiqui¨¢tricos que otorgan a Ver¨®nica una edad mental equivalente a la de una persona de cinco o seis a?os. La esterilizaci¨®n, para esa juez, es un a medida "extremada", "atentadora de su dignidad", "no suficientemente acreditada".La magistrada tambi¨¦n se basa en un informe m¨¦dico que habla de inexistencia de "impulsos epis¨®dicos desordenados". Ese informe a?ade: "No existe una demostraci¨®n clara de su posible fertilidad... Tampoco ha manifestado inter¨¦s por las relaciones sexuales".
Matilde S¨¢nchez, la madre de Ver¨®nica, teme muchas cosas. Una de ellas es que su hija regrese embarazada tras alguno de los numerosos viajes que realiza. Otra es que el embarazo provoque mayores problemas para Ver¨®nica. Tambi¨¦n se preocupa por qu¨¦ pasar¨¢ con su hija cuando quede hu¨¦rfana. Matilde sabe que cuando muera dejar¨¢ un problema. Y no quiere dejar dos.
Sexualidad libre
Herminia Royo, abogada de Matilde, rebati¨® ayer ante la Audiencia las tesis de la juez de primera instancia. Recalc¨® que la sexualidad es un derecho, no necesariamente vinculado a la procreaci¨®n, y que la ligadura de trompas es una pr¨¢ctica habitual entre muchas mujeres que desean mantener relaciones sexuales sin riesgo de embarazo. Todo ello muy lejos de los "impulsos desordenados" que evoca la juez de primera instancia. Royo resalt¨® que Ver¨®nica no puede ser madre: no est¨¢ capacitada para cuidar de sus hijos, pero s¨ª puede disfrutar de su sexualidad si as¨ª lo desea alg¨²n d¨ªa.La petici¨®n de los padres de Ver¨®nica cuenta con el respaldo del Institut Valenci¨¤ de la Dona, que ayer envi¨® una observadora al juicio. Tambi¨¦n cont¨® con la aquiescencia del ministerio p¨²blico. El fiscal mantiene que la esterilizaci¨®n beneficia a Ver¨®nica.
La esterilizaci¨®n ha estado castigada por el, C¨®digo Penal espa?ol hasta el a?o 1989. A partir de esa fecha, el art¨ªculo 428 de esa ley despenaliza la esterilizaci¨®n de incapaces siempre que exista autorizaci¨®n judicial. Los padres, o los representantes legales de los incapaces, pueden acudir a un juez de primera instancia para solicitar la autorizaci¨®n. En varias ciudades espa?olas se han autorizado judicialmente esas intervenciones quir¨²gicas en los ¨²ltimos cinco a?os.
Mientras el tribunal medita su sentencia, Ver¨®nica acude cada d¨ªa a un centro ocupacional en Valencia, donde realiza trabajos diversos. Tambi¨¦n participa en actividades deportivas.
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