Ancestros [DD] deNacional

La temporada habitual de la Compa?¨ªa Nacional de Danza en diciembre abri¨® con s¨®lo una verdadera novedad: la pieza de Mats Ek Ni?os viejos (1989), un fresco que pinta la infancia desde la s¨¢tira, en secuencias cortas, como vi?etas de un todo que es la fantas¨ªa de los peque?os monstruos. La crueldad despiadada y terrible de los personajes hace pensar en Adi¨®s a los padres, de Peter Weiss, y es la imaginaci¨®n la que redime hasta al perro, llena de una ingenua y a veces perversa poes¨ªa instintiva que los salva, los lleva a una ternura sin nombre y sin tiempo. ?se es el argumento de esta pieza menor, pero de buena factura y firme estilo personal, como todo lo que firma Ek, que dedica el ballet a su madre, la core¨®grafa Birgitt Cullberg, y ¨¦sta es la clave: romper la fuerte umbilicalidad con esa m¨¢ter potente, creadora infatigable; eterna vigilante. El montaje de Madrid, hecho por Ana Laguna, es cuidadoso, aunque con muy diverso sabor del de Estocolmo. Esto se explica por la diferencia de facturaci¨®n bailable que imponen los artistas.Las tres obras trataban de ancestros. La de Kilian, de los m¨¢s remotos, los egipcios representados por p¨¦treos ¨ªdolos de granito y oro; la de Ek, de sus propios padres llevados al fantasma de un dibujo infantil, y la de Duato, quiz¨¢ la m¨¢s epid¨¦rmica, recreando ritos de los indios americanos a trav¨¦s de la m¨²sica de Chaves; Sinfon¨ªa india apareci¨® debilitada por varias razones: la falta de orquesta, el uso de una grabaci¨®n con tempos inadecuados para bailar y la notoria falta de ensayos. Era como un bocata donde las dos partes de pan -Kilian y Ek- eran lo mejor, mientras la loncha de en medio resultaba demasiado delgada y suced¨¢nea de sus padres est¨¦ticos.

Destaca una vez m¨¢s Toni Fabre como el mejor elemento con que cuenta actualmente la compa?¨ªa y, entre los de casa, mantienen la moral y la t¨¦cnica en buen lugar Ra¨²l Tino, Cati Arteaga, Mar Baudesson y Ricardo Franco, que hace una conmovedora y hasta entra?able interpretaci¨®n del perro en Ni?os viejos. Hubo algo menos de media entrada en el teatro de la Zarzuela y el p¨²blico se mostr¨® caluroso en aplausos y bravos con todos los artistas.