Sanchis dice que la CEOE "actu¨® como correa de transmisi¨®n" en la recaudaci¨®n de fondos para AP

?ngel Sanchis, ex tesorero de Alianza Popular (AP), asegur¨® ayer en el Congreso que la patronal CEOE, "como tal, nunca dio un duro" a su partido, pero s¨ª "actu¨® de correa de transmisi¨®n" para recaudar fondos entre los empresarios. "AIgunas personas f¨ªsicas o jur¨ªdicas, en vez de entregar directamente el dinero al partido lo hac¨ªan a trav¨¦s de terceros", afirm¨® el antiguo responsable de finanzas de Manuel Fraga, quien compareci¨® ante la comisi¨®n de partidos pol¨ªticos para informar sobre el caso Naseiro, de presunta financiaci¨®n ilegal del Partido Popular.

Al contrario que su sucesor, Rosendo Naseiro, que el viernes neg¨® en el Congreso haber pedido "ni una sola peseta a empresa o particular alguno" para su partido, Sanchis admiti¨® haber enviado millares de cartas solicitando fondos y haber organizado cenas para "esquilmar a los amigos, a los conocidos y a los conocidos de los amigos". "No s¨¦ d¨®nde est¨¢ el problema", argument¨®. "Recibir dinero era perfectamente legal. No lo he negado nunca".Sanchis se expres¨® en todo momento con vehemencia y desparpajo, recriminando a los diputados el uso de documentos que, por basarse en un procedimiento judicial anulado por el Supremo, tildaba de il¨ªcitos. Consigui¨® indignar a la comisi¨®n cuando, por tres veces, acus¨® de mentiroso al representante de IU, Felipe Alcaraz.

Si bien admiti¨® haber recaudado dinero de particulares y empresas, neg¨® rotundamente haberlo hecho a cambio de alg¨²n favor pol¨ªtico, lo que hubiera constituido cohecho o prevaricaci¨®n. "La posibilidad de agradecer la ten¨ªan ustedes", le dijo al responsable del PSOE. "Era a ustedes a quienes daban dinero, a nosotros s¨®lo nos ca¨ªan algunas migajillas", apostill¨®.

Cuando se le record¨® que la ley marca un l¨ªmite m¨¢ximo a las donaciones privadas para los partidos, contest¨®: "Yo querr¨ªa que hubiese habido un l¨ªmite, pero por abajo, no por arriba". Sanchis ratific¨® impl¨ªcitamente la autenticidad de un informe, que dirigi¨® a Manuel Fraga en julio de 1986, en el que se dec¨ªa que "es urgent¨ªsimo que el resto que falta de la financiaci¨®n empresarial (87 M/de los 600 M/) llegue, para con ¨¦l hacer frente a los ¨²ltimos pagos de campa?a", al declarar que dicho documento "nos fue robado y publicado con posterioridad". [EL PA?S reprodujo el citado informe el 27 de abril de 1990].

Fernando Gimeno le record¨® que, aquel a?o, AP s¨®lo inform¨® al Tribunal de Cuentas de "una donaci¨®n an¨®nima de 394.000 pesetas, a lo que el ex tesorero replic¨® que "debe haber lan error" en la interpretaci¨®n del documento interno de AP, a?adiendo que lo que vale es lo declarado oficialmente.

A preguntas de Josep L¨®pez de Lerma (CiU), se mostr¨® partidario de prohibir las donaciones an¨®nimas y empresariales a los partidos, "porque muerto el perro se acab¨® la rabia". Sanchis confirm¨® que, desde hace un a?o, trabaja como asesor del grupo parlamentario popular, percibiendo una retribuci¨®n, aunque, en el campo de la financiaci¨®n es en el ¨²nico que no asesoro". Esto sirvi¨® a la mayor¨ªa de los comisionados para confirmar su sospecha de que el PP "nunca depur¨® responsabilidades pol¨ªticas por el caso Naseiro", en palabras de la representante del Grupo Mixto, Pilar Rahola, y que un informe interno de Alberto Ruiz-Gallard¨®n, en el que se tipificaba como falta grave la conducta de Sanchis, qued¨® en papel mojado.

Cuando estall¨® el esc¨¢ndalo, Sanchis se dio de baja en el PP "moment¨¢nea y circunstancialmente", pero no renunci¨® al esca?o ni dej¨® el grupo parlamentario, sino que sigui¨® hasta el final de la legislatura como "diputado stand-by". Sanchis, due?o de m¨²ltiples bienes en Espa?a y Argentina, dijo que, mientras fue parlamentario, realiz¨® la obligatoria declaraci¨®n de actividades y patrimonio, pero no crey¨® necesario remitirla al Congreso.

Jaime Ignacio del Burgo, del PP, dijo que el llamado informe Gallard¨®n, que aprob¨® la direcci¨®n del partido, "no ha sido rectificado, pero tampoco cumplido", y critic¨® al fiscal del Estado por no haber actuado de oficio ante la conducta "claramente prevaricadora" del juez Manglano, instructor del caso Naseiro.