Medicina agoniza
Bajo el lema Medicina 6=0, un mar de batas blancas ha inundado los paisajes urbanos en las ¨²ltimas semanas. Pidiendo firmas por las calles, haciendo donaciones P¨²blicas de sangre con la consigna "antes de que nos chupen la sangre, preferimos donarla", encerr¨¢ndonos en nuestras facultades, vendando estatuas, realizando todo tipo de manifestaciones y actos de protesta, los estudiantes de medicina chocamos contra el acantilado de una Administraci¨®n incompetente, ineficaz y mentirosa.El 1 de enero de 1995 se pondr¨¢ en vigor una directiva de la Uni¨®n Europea que obliga a los estudiantes a realizar una formaci¨®n posgraduada para poder ejercer como m¨¦dicos generales. Esta directiva fue promulgada en 1986, dando un plazo de nueve a?os a los Estados miembros para adaptar sus legislaciones. Los ministerios de Sanidad y Educaci¨®n nos han prometido a lo largo de este tiempo que solucionar¨ªan el problema lo m¨¢s r¨¢pidamente posible. Tras m¨²ltiples negociaciones a lo largo de los dos ¨²ltimos a?os, el 1 de marzo de 1994 el secretario general de Salud ratificaba en el Parlamento un compromiso adquirido con el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM) en base al cual se crear¨ªa un sistema de formaci¨®n espec¨ªfica en medicina general que garantizar¨ªa la capacitaci¨®n profesional de todos los licenciados a partir de la puesta en vigor de la directiva. Sin embargo, un mes m¨¢s tarde, la ministra de Sanidad, en declaraciones realizadas a la prensa, desdec¨ªa el compromiso al que se hab¨ªa llegado.
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Cuando s¨®lo faltan d¨ªas para la puesta en vigor de la directiva, los ministerios implicados mantienen que la formaci¨®n necesaria para poder ejercer se impartir¨¢ dentro de un sistema de especializaci¨®n (el sistema MIR), cuyo acceso est¨¢ restringido a uno de cada cuatro aspirantes. Seg¨²n esto, todos los licenciados que no consiguieran acceder a este periodo de formaci¨®n ver¨ªan su proceso formativo interrumpido y se encontrar¨ªan descapacitados profesionalmente: su licenciatura no les servirla para nada.
La Administraci¨®n argumenta que la directiva no impide que se trabaje en la sanidad privada. Sin embargo, los estudiantes sabemos que,esa posibilidad es nula, dado que si, a partir de 1995 la v¨ªa de formaci¨®n en medicina general es la especialidad que los ministerios pretenden (especialidad en Medicina Familiar y Comunitaria), los licenciados que no accedieran a ella no ser¨ªan, l¨®gicamente, m¨¦dicos generales, y s¨®lo podr¨ªan exhibir un t¨ªtulo acad¨¦mico (no profesional): el de licenciado en medicina.
Adem¨¢s, y por si fuera poco, la Sociedad Europea de Educaci¨®n M¨¦dica ya ha recomendado que la formaci¨®n posgraduada sea requisito imprescindible para la colegiaci¨®n, tal y como ocurre en otros pa¨ªses de la UE.
Los estudiantes de medicina no estamos dispuestos a que nuestra carrera se convierta en una academia de preparaci¨®n del MIR, y nuestro t¨ªtulo de licenciado quede vac¨ªo de contenido y reducido a ser un mero tr¨¢mite previa presentaci¨®n a dicha oposici¨®n. Asumimos la directiva comunitaria, pues consideramos imprescindible una formaci¨®n pr¨¢ctica espec¨ªfica (no especializada) que nos permita aplicar los conocimientos adquiridos durante la carrera y, en definitiva, mejorar la calidad asistencial en Espa?a. Pensamos que la Administraci¨®n est¨¢ obligada a garantizarla.Para conseguirlo, necesitamos el apoyo de todos los colectivos profesionales implicados, pero, sobre todo, la simpat¨ªa y solidaridad de la sociedad en general.
Luchamos, desde un punto de vista acad¨¦mico, y fundamentalmente humano, por lo que creemos de evidente justicia.-
Presidente del CEEM, m¨¢ximo ¨®rgano de representaci¨®n de los estudiantes de medicina en Espa?a.
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