Un 'derby' con mucho plomo
S¨®lo Karpin y Urrutia pusieron una pizca de est¨¦tica en el Athletic-Real
Nadie esperaba m¨¢s en tales condiciones. Un caldo caliente que reconstituyese el ¨¢nimo y un espect¨¢culo sudoroso sobre un cimiento de barro. Nadie esperaba m¨¢s porque Athletic y Real Sociedad hace tiempo que abandonaron su condici¨®n de escultores del barro y prefieren dise?os m¨¢s est¨¦ticos. Ayer se reconciliaron con la est¨¦tica del sudor pero fueron incapaces de sacarle rendimiento.El derby acab¨® en un caldo gordo, atiborrado de especies pero parco en exquisiteces. Sobre un terreno engorroso, Athletic y Real Sociedad no ejercieron de cocineros ilustrados y ali?aron un par de platos de rompe y rasga no sin esfuerzo y voluntad.
Ni el c¨¦sped de San Mam¨¦s es lo que era y se pliega con docilidad a las exigencias climatol¨®gicas. La lluvia, intensa en Bilbao, lo convirti¨® en un fangal y sabido es que ni uno ni otro equipo se desenvuelven bien entre pucheros de caldo gordo. As¨ª que el derby se desgran¨® entre esforzados del barro s¨®lo superado por la inteligencia de Urrutia y Karpin para ponerle una pizca de maestr¨ªa.
Los dos equipos vascos no se distinguen por el aplomo y el car¨¢cter. Tienen esquemas definidos y un ramo de futbolistas bien dotados. Pero su condici¨®n conservadora les retrae posibilidades. El clima y la psicolog¨ªa les hicieron convenir una disputa agresiva y muscular al gusto tradicional y condenada al sudor ey al sacrificio.
El Athletic, si acaso, le puso m¨¢s ardor y la Real Sociedad mejor organizaci¨®n. Ambas caracter¨ªsticas constituyen instrumentos singulares del f¨²tbol pero por s¨ª solas no garantizan victorias.
Fue ciertamente un derby de fuerza, de voluntad, de sacrificio, de todo aquello que dibuja el car¨¢cter ¨¦pico de este juego. Pero el f¨²tbol no pudo con el barro y acab¨®, como el c¨¦sped, hecho trizas.
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